Barcelona dará un paso más en su control del perros para intentar mejorar la convivencia entre los ciudadanos. El Ayuntamiento lleva años intentando implementar nuevas condiciones que ayuden a garantizar el bienestar animal y al mismo tiempo poner orden en las malas prácticas de determinados propietarios.
Para ello, el gobierno municipal actualizó recientemente la Ordenanza para la protección, tenencia y venta de animalesque incluía, entre otros aspectos, la prohibición de poder llevar al animal suelto por la vía pública, una medida que desde el principio indignó a un buen número de propietarios pero que, pese a ello, prosperó.
Ahora, un nuevo decreto endurecerá las condiciones para caminar. En concreto, desde 18 de diciembre Entrará en vigor la obligación de llevar a su mascota con correa en toda la ciudad, a excepción de las zonas autorizadas. El Ayuntamiento, de hecho, hacía tiempo que quería implementar esta medida pero no había logrado activar las sanciones porque el gobierno municipal entendía que básicamente faltaban espacios para que los perros camparan libremente por la ciudad.
Áreas de uso compartido
Por eso, en un principio se aprobó una moratoria que evitaba estas multas pero ahora, con nuevos espacios para las mismas en funcionamiento, comenzarán las sanciones. Los nuevos espacios son los nombrados áreas de uso compartido para perros, donde los perros pueden estar soltados a determinadas horas del día.
la ciudad tendrá 225 de estos espacios, repartidos por todos los distritos y que en su mayoría son zonas caninas existentes. Entre ellos se encuentran 109 espacios que no son exclusivos para animales pero en los que se acepta que pueda haber “convivencia” entre los usuarios y sus usos. Serán, por ejemplo, jardines, plazas o avenidas en las que a primera o última hora del día o al mediodía los perros podrán campar libremente.
Una señal, como las que se están instalando estos días, advertirá de estas zonas neutrales. Este jueves, el Ayuntamiento se ha apresurado a recordar que la ciudad ya cuenta con zonas específicas para perros de calidad y que, con estos 225 puntos, habrá algunos 900.000 metros cuadrados para que los perros puedan ir sin correa y divertirse, jugar con otros perros y realizar actividad física.
Las multas pueden oscilar entre los 100 euros, cuando el perro esté suelto fuera de los espacios autorizados pero no suponga un peligro. Si se entiende que el animal supone un peligro para otras personas o el medio ambiente, la multa ascenderá a 300 euros y cuando los perros se encuentren en parques infantiles puede alcanzar hasta los 300 euros. 600€.