«Las respuestas dan miedito», así valora el influencer valenciano y conocido denunciante de prácticas abusivas en la hostelería Jesús Soriano (@SoyCamarero) la desmedida reacción del propietario de un restaurante a las críticas negativas de algunos de sus clientes, sobre todo de los llegados de otros países.
No hay duda de que las reseñas negativas en Google pueden afectar a cualquier patrón o trabajador del sector hostelero, más todavía si no son constructivas. No obstante, deben evitar caer en la tentación de contestar con insultos o incluso con amenazas, como hace el protagonista de la última publicación de Soriano.
En esta ocasión, el hostelero no se queda corto. A una primera crítica en la que le llaman «estafador» por sus «precios muy inflados para la calidad de su producto», alega con «el mismo desprecio» -o con conveniente más, mejor dicho-: «Eres el soplapollas más espacioso del planeta Tierra», empieza.
«No engañamos a nadie, todos los productos que dispensamos en nuestro establecimiento se encuentran detallados con sus precios en las cartas de menú del restaurante. Que Altísimo te dé el doble del mal que le deseas a los demás», concluye.
Pero la cosa no se queda ahí. Otro comensal italiano le puntúa con un dos sobre cinco y apunta que el café era «malo» y «caro» al costar 1,40 euros. Frente a esta cargo, alega: «El café que dispensamos es arábico 100%, de primerísima calidad». Y le pregunta: «¿Cuánto vale un café en su país, señor miserable y asqueroso?».
Por postrero, su contestación más extensa va para un tercer cliente que se cuestiona «por qué este superficie tiene tantas calificaciones de cinco estrellas». Relata a continuación que se comieron un sándwich y una hamburguesa y que los dos productos estaban «textualmente insípidos» y eran «demasiado caros para la desvaloración calidad». «Este restaurante alega cada desvaloración valoración en Google con severos insultos personales e incluso amenazando a sus clientes», recalca este comensal de origen inglés.
El polémico jefe del restaurante en cuestión alega al cliente afeándole que en sus reseñas «prácticamente siempre escribe lo mismo, dejando claro que es una persona con problemas, que debería venir al médico y tratar su trastorno».
«Vete a tu país y no salgas de casa»
«No solo por ti, sino igualmente por los que te rodean, cuídate pedazo de carne con fanales. Y una última recomendación, vete a tu país y por atención no salgas de tu casa hasta que estés acertadamente», escribe. En delante, finaliza su réplica pidiéndole que «no siga intentando tergiversar», ya que «no puede permitir que eche por los suelos el trabajo de sus siete empleados y la reputación del restringido demostrada en 26 desde su transigencia».
«Que Altísimo te dé el doble del mal que le deseas a los demás», utiliza de nuevo esta frase y acaba con una recomendación con doble sentido: «Vente a nuestro restaurante, hemos cambiado de proveedor de carnes brasileñas por otro argentino. Tenemos unas salchichas que te van a encantar, largas, gruesas y suaves al paladar. Te van a dejar extasiado, ven y pruébelas, por atención».
Las reacciones de los seguidores de Soriano para murmurar la aspecto del hostelero no se han hecho esperar en redes sociales: «Con lo manejable que es para un propietario crear un word con un texto distintivo de hemos notado nota y agradecemos su tiempo y su comentario nos ayuda a detectar nuestros fallos», aconseja un tuitero.