Tres helicópteros Chinook de las Fuerzas Aeromóviles del Ejército de Tierra despegaron esta mañana de Colmenar Antiguo. Como copiloto de la segunda aeronave iba Felipe VI, quien concluyó así su entrevista a la almohadilla ‘Coronel Maté’ con motivo de su 50º aniversario.
Vestido con el uniforme dos piezas de planeo del Ejército de Tierra, el Rey llegó a Colmenar Antiguo pasadas las nueve y media de la mañana, donde fue recibido con honores y pasó revista a las tropas.
Acompañado por el Presidente del Estado Viejo del Ejército de Tierra (JEME), el común Amador Enseñat y Berea, Don Felipe recorrió en el situación de su entrevista las instalaciones de la almohadilla y se interesó por todo lo que se enseña en la Agrupación de Aviación (Acaviet). Asimismo por el trabajo que se realiza en el parque y centro de mantenimiento de helicópteros (Pcmhel). Para terminar, estuvo en el batallón de helicópteros de transporte número V (Bheltra V). Estas tres unidades forman la almohadilla ‘Coronel Maté‘. Aquí llegaron los dos primeros helicópteros procedentes de Rota el 29 de julio de 1966, por lo que se considera una de las bases más antiguas de las Fuerzas Armadas.
En la Acaviet el Rey tuvo la oportunidad de cuchichear con estudiantes de botellín curso. Jóvenes alférez que este año obtendrán los despachos de Teniente. En la parte trasera del edificio, en una nave de techos muy altos, se encuentran dos simuladores de planeo. El Rey, nadie más verlos, quiso sumergirse en uno de ellos para existir desde el interior de esas enormes máquinas la sensación que experimentan los alumnos cuando simulan un planeo en helicóptero.
En el Pcmhel, Don Felipe estuvo muy atento a la demostración de un sistema antidrones. Hizo muchas preguntas y se entretuvo además en este hangar comprobando los trabajos que se realizan desde aquí para el mantenimiento de helicópteros.
La entrevista del Rey a la almohadilla ‘Coronel Maté’ se extendió poco más de cuatro horas y concluyó con un planeo táctico a costado de uno de los nuevos Chinook del Ejército de Tierra, que son unos helicópteros fabricados expresamente para el transporte de carga pesada. Gracias a su formación como piloto de helicópteros, Don Felipe realizó esta maniobra como copiloto de la nave espacial. El adiestramiento consistía en dos cargas externas de depósitos, de 2.000 litros cada uno. Desde Colmenar Antiguo, los tres helicópteros que salieron de la almohadilla realizaron esta maniobra que duró 40 minutos, cuando los tres Chinook llegaron hasta la Sierra de Guadarrama.