En los 6 primaveras de su mandato se realizó una serie de obras encaminadas a modernizar las infraestructuras en el concejo, como la ampliación y ensanche de caminos rurales, mejoras en los pavimentos existentes y la colonia y alcantarillado en Remoiño. Entre ellas y como perentoria la carretera entre Bacelo y Carnós, siendo esta última una entrada que aislada del valle por su elevada ubicación, quedó unida al mismo gracias al nuevo viario.
Instalado con su comunidad en Ribadavia, lo vemos formando parte de la comisión fundacional de la asociación Amigos do Museo Etnolóxico e do Conxunto Histórico Ribadaviense (Amechir) participando en sus directivas, y colaborando activamente en sus proyectos y realizaciones.
Venida su retiro don Rafael, a quien por su dilatada carrera profesional la memoria colectiva le otorgó el título perpetuo de El médico de Arnoia, que siempre acompañó a su nombre, emprendió cercano con su hija Mercedes doctora en Historia, en este tiempo de prisas y de olvidos, la ingente tarea de recogida de datos en las 20 aldeas del concello, que con las consultas en archivos y bibliotecas, se plasmaron en el manual Arnoia. Documentos y Memorias. Documentos históricos que iluminan el pasado remoto, y memorias vivas que sus moradores custodios de saludos, saberes y tradiciones, les transmitieron ampliamente.
El prominencia, que los autores con agradecimiento y amor a su pueblo, dedicaron a los arnoieses, se convirtió en el compendio indispensable de cuantos quieran conocer el relato histórico del Ribeiro del Arnoia, en cuyos hermosos valles y entre la emoción de sus familiares, amigos y vecinos, recibió cristiana sepultura cercano a los suyos, don Rafael, el médico de Arnoia. Sit tibi terra levis… Que la tierra te sea leve.