La sentencia de la Justicia europea, del 5 de julio, supuso un revés para el político independentista, así como para Toni Comín y Clara Ponsatí, los asesores de su gobierno y eurodiputados que también se fugaron de la Fiscalía española tras el fallido unilateral Declaración de Independencia (DUI) de 2017.
La sentencia confirmó que el Parlamento Europeo les retiró la protección parlamentaria (que luego recuperaron cautelarmente) correctamente. Lo hizo a petición del juez del procés, Pablo Llarena, quien envió la petición para poder continuar el procedimiento abierto en España contra ellos por el procés. La misma causa por la que el exvicepresidente catalán Oriol Junqueras y el resto de concejales que no escaparon se sentaron en el banquillo del Tribunal Supremo, fueron condenados y estuvieron en prisión, aunque el Gobierno finalmente les indultó las penas de prisión.
Según ha podido saber torrevieja news today de fuentes de la defensa de Puigdemont, este no acudirá al Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) para intentar revertir la decisión hasta septiembre. El plazo vence el día 15 y podría haber interpuesto el recurso de apelación, que anunció nada más dictar la decisión, desde ese momento.
La persecución fue rechazada
Un aval de la sentencia del TGUE por parte del TJUE sería muy desfavorable en estos momentos para la estrategia política del expresidente catalán y de Junts, su partido político. La formación, al igual que Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), exige al PSOE que apruebe una ley de amnistía que permita “sacar de los tribunales” definitivamente el procés para apoyar una investidura de Pedro Sánchez y que éste pueda permanecer en la Moncloa.
El mensaje que repiten los representantes separatistas es que el proceso judicial contra quienes iniciaron la ruta independentista que acabó con el fallido DUI y el referéndum ilegal del 1 de octubre fue una campaña de “lawfare” contra políticos por su ideología independentista. Por tanto, consideran que debería anularse y revocarse mediante la citada amnistía, provocando también que decaigan las causas que aún están pendientes en el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña y otros tribunales. Esto, a pesar de que tanto el Tribunal Constitucional como el TGUE, en su resolución de julio, descartaron una persecución política por parte de los tribunales y del Parlamento Europeo, respectivamente, contra ellos.
En concreto, el Tribunal General de la Unión Europea respaldó el argumento de la Comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento Europeo (JURI), que argumentó que los hechos por los que el juez Llarena pidió levantar la inmunidad de los parlamentarios para proceder contra ellos fueron anteriores a su elección. Sin embargo, tanto Junts como ERC insisten en esta supuesta campaña de acoso y persecución por parte de la Justicia española, otros partidos políticos y medios de comunicación contra los independentistas. De hecho, extienden la campaña de acoso que ven abierta desde hace años contra ellos a Laura Borràs, expresidenta del Parlament y líder de Junts condenada por un caso de corrupción, en concreto por cortar contratos de la Institución de las Letras Catalanas. (ILC). , organismo público que él dirigía, para favorecer a un amigo.
La portavoz de Junts en el Congreso, Míriam Nogueras, preguntó en una entrevista reciente con la Agencia Catalana de Noticias que la ley de amnistía también la beneficia a ella. Puigdemont -que puede moverse libremente por Europa porque el instructor del proceso no ha dictado una nueva orden de detención contra él a la espera de la presentación de su recurso contra la decisión del TGUE- ha solicitado “hechos comprobables” que avance esta ley antes de dar cualquier voto a Sánchez .
Necesario para Sánchez
El presidente en funciones y líder socialista necesita inevitablemente los votos de Junts en la Cámara Baja para jurar su cargo, mientras que el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo -al que el rey Felipe VI ha encargado intentar formar gobierno como el candidato que trajo reunir más escaños- puede ser apoyado por otras formaciones.
Aun así, incluirá al partido del expresidente catalán en su ronda de convocatorias, de la que sólo excluirá a Bildu. Falla en primavera Puigdemont, que, aunque no tiene ningún cargo orgánico en Junts, sigue ejerciendo como líder “en el exilio”, según define su propia formación, está procesado por malversación y desobediencia como principal impulsor del procés . La reforma del Código Penal impulsada por el PSOE, que eliminó el delito de sedición y lo sustituyó por el de desorden público, ya ha favorecido al expresidente catalán.
El juez del Tribunal Supremo tuvo que modificar su procesamiento, ya que antes de la modificación legal se esperaba que se sentara en el banquillo por los mismos delitos que Junqueras. Una vez presentado ante el TJUE el recurso contra la retirada de la inmunidad, aún faltan seis meses para que se resuelva a partir de septiembre, de modo que la sentencia se conocería una vez superadas las negociaciones para la investidura.