A desidia de conocer los datos del cuarto trimestre, la Trabazón se anima a vaticinar que Castilla y Valeroso cumplirá este año su previsión de crecimiento. Una meta que el Gobierno regional situó en el 1,6 por ciento y que se «superará», pese a la «cierta desaceleración» que constatan ya las cifras. Así lo ha destacado este lunes el mentor de Patrimonio, Carlos Fernández Carriedo, quien detalló que, aunque el ritmo de la heredad ha bajado en el tercer trimestre de 2023 y seguirá esa misma tendencia a final de año, el objetivo fijado se podrá alcanzar, ya que hasta, según sus cifras el crecimiento de enero a septiembre estaba en el 2,8.
La ralentización de la crecimiento económica era poco con lo que ya contaba la Trabazón, dijo Carriedo. «Estaba previsto», ha considerado al explicar los datos de la Contabilidad Regional del tercer trimestre, donde el mejora se redujo al 1,8 por ciento, siguiendo el compás traumatizado ya en el precedente trimestre. Se prostitución de la misma guarismo que se registró a nivel estatal, pero superior a la que marcaron la UE y la zona euro, con al punto que crecimiento (0,1). Los sectores de la construcción y los servicios son los que se salvan en este decorado, con crecimientos del 3 y el 2,8 por ciento, mientras que la industria echa incluso el freno, con un 0,5. «Todavía es una crecimiento positiva», ha expresado el mentor, ayer de memorar que a nivel doméstico este ámbito es un apartado que ya se encuentra en agorero.
Encima, fue el sector agreste el que aportó el «peor número» al PIB regional con una caída del 8,5 por ciento respecto al año precedente. Un desplome que se suma a los ya padecidos en 2021 y 2022 y que se explica, dijo, porque la cosecha «fue negativa en tamaño y precio». Así las cosas, lo «positivo», consideró Carriedo, es que la heredad de Castilla y Valeroso «sigue creciendo» con un ritmo acumulado en los tres trimestres del 2,8 por ciento, «por encima de la media doméstico» y de la Unión Europea, que previsiblemente se reducirá cuando se conozcan los datos del postrer tramo del año, donde el decorado de desaceleración será similar, según las previsiones del mentor.
Parecido será incluso el comportamiento de 2024, ha intuido Carriedo pese a no acontecer hecho aún una previsión oficial en presencia de la desidia de los presupuestos de la Comunidad del próximo control. No obstante, consideró que la Comunidad podría seguir creciendo, eso sí, «a pequeño ritmo». «Será difícil ver un número tan agorero en el sector agreste», indicó al respecto, ya que en los dos ejercicios anteriores se han acumulado descensos.
Los hogares
Es la demanda interior la que sigue tirando de la heredad regional, ha asegurado, mientras que la externa supone el 0,3 por ciento, conveniente, sobre todo, a las exportaciones. Un asunto en el que ha indicado que aún es pronto para enterarse si afectará la disputa en Israel y Palestina y donde lo «preocupante» es el rumbo de los «principales socios» de la Comunidad, que son los países de la Unión Europea. «Si a ellos les va mal, no es un buen número», ha indicado Carriedo, que apostó en este punto por «explorar» nuevos mercados y zonas geográficas asegurando así el futuro de las ventas en el foráneo.
Otro aspecto que inquieta en cuanto a la demanda interior es no tanto que las administraciones públicas hayan frenado su nivel de compra tras una pandemia que obligó a incrementar esa partida, sino que el consumo de las familias «no remonta» y supone un 0,7 por ciento respecto al 2 por ciento de los poderes públicos.
En cuanto a la posibilidad de que las comunidades autónomas asuman las competencias en los servicios ferroviarios de cercanías, tal y como expresó el ministro de Transportes, Óscar Puente, el incluso portavoz de la Trabazón seguró que Castilla y Valeroso ve «irrenunciable» la «igualdad de trato». «No es tanto el techo competencial» ni aceptar lo mismo que otros territorios tienen, explicó en presencia de las declaraciones del ministro, sino que lo que le preocupa a la Trabazón es que se «garanticen las inversiones»en todos los territorios por igual. Así, insistió en que si se realizan importantes inversiones para otras autonomías, como los 6.000 millones de euros y un peso de acuerdo al porcentaje de peso del PIB para Cataluña, lo que desde Castilla y Valeroso se solicita es que que se destinen incluso para esta autonomía, que «tiene más departamento y extensión ferroviaria», concretó.