El Ministerio de Educación tomará el “abandono de funciones” de varios funcionarios que ejercieron cargos de libre designación durante el anterior gobierno de Ximo Puig y que cesó a petición propia justo antes de que comenzara el caos de la adjudicación de plazas a docentes.
“Abandonar un trabajo fundamental estos días no es lo más adecuado”, afirmó el ministro José Antonio Rovira, al considerar “si es ético”aunque está en su derecho, “autorizar que una persona implicada en este proceso pueda dejar todo a medias”, por lo que valorarán si esta actitud es “motivo de expediente”.
Es el caso de los tres directores territoriales, los jefes de servicio, el subdirector general de Dotación de Personal Docente y el jefe del Servicio de Gestión y Determinación de Personal Docente. Todos ellos cesaron a mediados de julio, en plena toma de posesión de los cargos de la nueva Ejecutiva regional de PP y Vox que lidera Carlos Mazón.
Con todas las listas publicadas tras semanas de incertidumbre y a pocos días de que profesores y profesores entren en los centros educativos, el jefe del departamento que gestiona los populares ha explicado este jueves que todavía quedan Alrededor de 400 incidencias por resolver..
En una rueda de prensa junto al secretario autonómico de Educación, Daniel MacEvoy, y la directora general de Profesorado, Sonia Sanch, Rovira ha garantizado que la mayoría de los profesionales ya conocen su destino para el nuevo curso académico y se ha comprometido a actualizar el sistema .
El “máximo responsable” de los premios a 21.000 docentes, que se han concluido este miércoles por la mañana, ha atribuido los errores de un programa informático “obsoleto” a la Falta de previsión de sus antecesores de Compromís y PSPV, que fueron advertidos por los técnicos en 2020 sobre lo que podría pasar. Si no hubiera habido cambio de gobierno, según Rovira, “se habrían encontrado con el mismo moreno”.
Una “bomba” que ha estallado por el carácter “extraordinario” del proceso, que este año contaba con dos nuevas variables para las que la herramienta no estaba preparada: la estabilización de la plantilla y el traslado de profesores técnicos de FP a Secundaria, que reúne más de un centenar de reclamaciones.
Desde Educación no contemplan, como proponen los sindicatos, sin compensación debido a los prejuicios que el tortuoso proceso haya podido traer a los profesionales. La ministra también ha rechazado la afirmación del exsecretario autonómico Miquel Soler de que la destitución de unos 200 cargos de confianza tuvo que ver con lo ocurrido.