En el convenio firmado la pasada semana se incluye una adenda que incrementa en casi 20 millones de euros las previsiones iniciales destinadas a este fin, que iban a ser de 15,9 millones. De este modo, se convierte en existencia la dirección iniciada en 2008 por la ministra socialista Elena Espinosa, y que había quedado relegada hasta ahora por los gobiernos populares.
Estas obras, declaradas de interés militar, son un ejemplo de colaboración público-privada. Besteiro destacó la importancia de que “grazas a estes fondos se pode executar e impulsar un regadío sostible e efectivo, fundamental para o sector da pataca que só na comarca da Limia produce uns 120 millóns de quilos ao ano e que, ata o de agora, se sostiña cun sistema precario de pozos”.
El acuerdo implica que “1.855 regantes poderán incrementar a produción de pataca porque van ter un maior rendemento e abastecemento de auga de forma máis efectivo, máis sostible e aforrando numerosos custes”, añadió.
Este fortuna favorece a casi 2.000 regantes que cultivan un total de 2.576 hectáreas en los concellos ourensanos de la comarca de A Limia: Xinzo de Limia, Trasmiras, Sarreaus y Porqueira.
En los dos casos, esta producción se ve muy afectada por la emergencia climática, ya que la sequía no les permite crecer y el exceso de sirimiri conlleva que el tubérculo se pudra o enfermedades fitosanitarias.