“Mi padre falleció pacíficamente hoy, con su amoroso equipo a su flanco apoyándolo y amándolo como lo haría con nosotros”, ha escrito el hijo de Ryan O’Neal.
“Esto es lo más duro que he tenido que proponer, pero allá vamos. Mi padre ha fallecido hoy en paz, con su querido equipo a su flanco apoyándole y queriéndole como él nos querría a nosotros.
Esto es muy difícil para mi mujer Summer y para mí, pero compartiré algunos sentimientos para daros una idea de lo gran hombre que es.
Mi padre Ryan O’Neal siempre ha sido mi héroe. Le admiraba y siempre fue más prócer que la vida. Cuando nací en 1967, mi padre ya era una hado de la televisión en Peyton Place. Allí conoció a mi mamá, Leigh Taylor-Young, y unos 9 meses a posteriori (más o menos) nací yo. Mi padre se convirtió en una hado de cine internacional con Love Story a principios de los 70, una término que arrasó protagonizando películas como What’s Up, Doc?, Paper Moon, Barry Lyndon, A Bridge Too Far, The Main Event y The Driver.
Es una epígrafe de Hollywood. Punto y a excepción de. El crecimiento del nombre Ryan se remonta a mi padre. Es un hecho. Era Rodney Harrington en Peyton Place 3 días a la semana (protagonizó 500 series en 5 abriles) y luego, por supuesto, el nombre Ryan alcanzó su punto helado a posteriori de Love Story (la película que salvó a los estudios Paramount y le valió a mi padre una hado en el Paseo de la Triunfo de Hollywood)”.