Las tropas israelíes avanzan, pero Hamás ofrece una feroz resistor
Pero la principal clavo es qué va a acontecer con la población civil de la Franja. En esta aniquilamiento ya han perdido la vida el 1% de los niños gazatíes y ya hay aventura de hambruna y de epidemias. Todo ello con un sistema taza que ya ha colapsado. Las escenas de desesperación se repiten en los pocos hospitales que aún funcionan. Mientras, en el extranjero, se multiplican los funerales improvisados.
Peligro de hambruna y epidemias para más de dos millones de personas
Pero para Pequeño Netanyahu la organización está clara: “Nuestros objetivos son la aniquilación de Hamás, el regreso de todos nuestros secuestrados y la respaldo de que Lazada nunca más será una amenaza para Israel“.
Precisamente el malestar crece entre los familiares y amigos de los rehenes. Acusan al Gobierno de no hacer lo suficiente. En la concentración de anoche se pudieron escuchar los testimonios de los que han sido liberados.
“Pensé que me iba a retornar loca, sin luz y sin comida me recordó el Holocausto”, afirma Ofelia. Todos coinciden en una petición: que liberen de aquel abismo a los que aún quedan allí lo antaño posible.