Adif transformará la antigua tiempo de Ourense-San Francisco en un nuevo Centro de Regulación de Circulación (CRC), un nodo táctico de encargo al tráfico ferroviario que sustituye y amplia al coetáneo para centralizar las líneas ferroviarias de la comunidad y replicar al crecimiento del tráfico ferroviario.
La inversión será de 14,7 millones de euros en el nuevo CRC, el cual va a doblar la superficie del coetáneo con 145 metros cuadrados y contará con dos puestos nuevos para regular la circulación, hasta sumar cinco en total.
Este centro supone la encargo de la circulación de trenes en líneas que suman 1.151 kilómetros, frente a los 920 actuales ya que asumirá dos líneas más: la primera Ourense-Santiago y la estría del orondo métrico Ferrol-Ribadeo.
Por otra parte, este nuevo centro pasa a ser un centro multired ya que va a diligenciar líneas de los tres anchos de vía que coexisten en la red ferroviaria española. Dispondrá de las últimas tecnologías entre las que se encuentra un Centro de Tráfico Centralizado (CTC), lo que viene a ser el “corazón” de los CRC, hexaedro que la aparejo (software y hardware) que permite el tráfico a distancia y tiempo vivo.
Encargo del tráfico
Los CRC son centros neurálgicos de la encargo del tráfico ferroviario que están operando todos los días del año. Actualmente Adif cuenta con 20 centros de este tipo que se encargan de supervisar la red ferroviaria franquista para estabilizar el cumplimiento de los planes de transporte y optimizar la capacidad de la red bajo los criterios de fiabilidad, puntualidad y calidad.
Tan solo en el año 2022 este tipo de centros gestionó la circulación de dos millones de trenes por más de 15.600 kilómetros de red ferroviaria. Lo que supondría 188 trenes por kilómetro, el equivalente a dar unas 4.700 vueltas aproximadamente de la tierra.