perfil
Se inició en política siendo un adolescente en los movimientos de estudiantes y es un perfil ‘pura raza’ de Sortu
Su nombre no sonaba en las quinielas, pero Pello Otxandiano (Ochandiano, 1983) era uno de los relevos naturales para Arnaldo Otegi. Podría decirse que ha crecido, políticamente hablando, en su regazo. Creció en las juventudes del partido y desde allí dio el brinco al núcleo duro de la formación mayoritaria en EH Bildu.
El cañoneo de su pueblo nativo el 22 de julio de 1936, en el que murieron su bisabuelo y dos hermanos de su abuela materna, constituyó un momento fundacional para su comunidad, poco que ha traumatizado el devenir y la visión de las siguientes dos generaciones. Allí ocupó como concejal su único cargo institucional, pero no por ello su bagaje político es pequeño. En 2016, cuando al punto que tenía 33 primaveras, fue uno de los encargados de refundar Sortu a posteriori de acontecer sido legalizado.
Ya entonces el nuevo candidato de EH Bildu defendió rajar una «nueva civilización política» que permitiera al independentismo vasco extender la pulvínulo electoral. Fue primero director de Programas en Sortu y desde el año 2021 ha ocupado el mismo cargo en la coalición EH Bildu. Su pragmatismo le ha convertido en uno de los ideólogos de la ‘nueva’ izquierda independentista. A pesar de ello, Otxandiano se mantiene fiel a los postulados de Otegi y considera la nueva táctica para alcanzar el objetivo postrero de su partido: la independencia.