Primer hospital castellano manifiesto que recibe esta distinción
Esta distinción es la primera que recibe un hospital castellano manifiesto tras el observación de cerca de 1.300 estándares de calidad que le han colocado como uno de los mejores centros internacionales gracias a la implicación de todo el equipo de profesionales en materia de seguridad del paciente, su liderazgo en innovación y su clara orientación al paciente.
El sello dorado pone de manifiesto y en singular valencia dos de las líneas principales del hospital: la capacidad, compromiso y nivel técnico de todos los profesionales (caracterizados por poner capital, talento, ciencia e innovación en su atención al paciente) que forman parte de la institución y una logística muy clara y consolidada, que pone al paciente en el centro y da prioridad a la seguridad clínica y a su atención personalizada.
“Es un orgullo enorme, hacemos muchas cosas y las hacemos muy perfectamente”
Adicionalmente, los evaluadores anunciaron su recomendación de la Fundación Jiménez Díaz a la JCI para la confirmación del hospital: “Para todos los profesionales que forman parte de la Fundación Jiménez Díaz, aceptar este sello, que se suma a la confianza que recibimos de nuestros pacientes cada día, es un enorme orgullo y contribuye a la sensación de confianza de nuestro equipo de que hacemos muchas cosas y las hacemos muy perfectamente”, asegura el Dr. Javier Arcos, administrador y director médico del citado hospital.
No es la primera distinción al hospital Jiménez Díaz ya que en 2021 se convirtió en el primer hospital del mundo en aceptar el EFQM Universal Award, Premio a la Excelencia en Dirección de decano prestigio internacional, con el que la Fundación Europea para la Dirección de la Calidad reconoce a las empresas con “resultados excelentes y sostenibles” en todas las áreas del Maniquí de Excelencia EFQM, y obtener el sello EFQM 7 Stars, con más de 750 puntos de valoración, máxima puntuación de este inspección.
Cumple con las 6 metas internacionales de seguridad del paciente
No obstante, incluso junto a destacar las seis metas internacionales de seguridad del paciente con las que cumple la Fundación Jiménez Díaz: identificación inequívoca del paciente; comunicación efectiva; alivio de la seguridad de los medicamentos de detención aventura (MAR); apuntalar la cirugía, el procedimiento seguro y el sitio correcto; disminuir el aventura de infecciones asociadas a la atención sanitaria; y sujetar el aventura de daño al paciente por causa de caídas.
“Estudiar de los errores, sujetar la variabilidad en la habilidad clínica, precaver infecciones inherentes a la habilidad clínica y potenciar nuestras competencias en materia de seguridad, son algunas de las líneas que, si perfectamente llevábamos mucho tiempo trabajando adentro de nuestra institución, hemos mejorado a lo abundante de este proceso y nos han permitido sujetar riesgos, tanto para los pacientes como para los profesionales”, apunta el Dr. Arcos.
El orden, el compromiso y la comunicación entre los profesionales sanitarios del centro permite una atención exhaustiva, personal y completa al paciente desde que entra hasta que sale del hospital: “Ofrecer una atención oportuna que cubra las deposición del paciente, apuntalar la coordinación entre todos los profesionales para la continuidad de los cuidados, y establecer las barreras oportunas que garanticen cero daños en el paciente son algunos de los estándares de la JCI que hemos consolidado para seguir avanzando con destino a la excelencia y alcanzar mejores resultados en salubridad”, cuenta Ana Delicia Dorado, directora de Botiquín del hospital.
Por otra parte, Marta del Olmo, directora de Experiencia de Paciente de la Fundación Jiménez Díaz, ha recordado que las organizaciones acreditadas por la JCI demuestran su compromiso con un maniquí de éxito basado en la atención centrada en el paciente.