La negativa de un hostelero de Vilardesilva (Rubiá) a servir a Miguel Arcángel C.F. bebidas alcohólicas desembocó en una airada reacción por parte de este postrer. Ayer, en el Supremo Penal 2, admitió los hechos y aceptó una condena de seis meses de mazmorra por un delito de lesiones.
Los hechos sentenciados ocurrieron una tinieblas de verano del año 2022 cuando el inculpado quería libar trinque. Salió del bar y fue a apañarse un catana de grandes dimensiones para intimidar al hostelero, quien ya había ido a casa cuando Miguel Arcángel retornó al bar. Toda vez que el denunciante no estaba en ese zona, el perceptible fue a casa en su búsqueda y comenzó a abroncar desde la calle: “Ahora estás en lo alto, mañana te corto la persona”.
La fiscalía acusó por un delito de amenazas y reclamaba inicialmente una pena de un año de prisión.