A Rosi la conocimos en 2013, fue una de las primeras ganadores de aquella profusión de millones de la que hoy se conoce como ‘la surtidor de la suerte’. Se llevó 125.000 euros porque tenía un décimo de un Segundo premio de la Suerte de Navidad. Hoy la volvemos a encontrar en el mismo sitio, la misma surtidor en rastreo del mismo premio. “Yo creo que sí me va a retornar a tocar, lo que está para ti te persigue”, asegura Rosi con vistazo cómplice mientras nos explica cómo eligió aquel 79.712 que la hizo tan acertado “mi hermana quería un número terminado en 8 y yo le dije que no, yo estaba empeñada en uno consumido en 2. Lo vi y supe que era para mi”.
Y claro, teniéndola tan cerca, teníamos que preguntarle cual es el secreto, cómo elige los números… Una vez en la ventanilla le dice discretamente qué número quiere: “Elijo un número que se me viene a la cabecera en ese momento, no traigo una idea preconcebida”.
Cree firmemente que la suerte va con cada persona y que ella es afortunada, por eso piensa que le volverá a tocar. No ambiciona millones, por eso no negocio asiduamente, solo en Navidad.
Hablamos con otro triunfador
En la misma ventanilla de la surtidor ‘La Chasnera’ nos encontramos a otro triunfador. Fran repite cada mes de diciembre su visitante a esta surtidor a pesar de que en 1991 compró aquí un décimo del Regordete. “Lo repartí todo entre mis hijos y mis nietos. No me quedé con nadie y eso me ha hecho más acertado por eso vuelvo cada año”, cuenta.