Nunca ayer el apoyo a la independencia había sido tan bajo. Según el Deustobarómetro presentado este viernes en Bilbao, solo el 13% estaría a distinción de una Euskadi independiente. El cifra es el pequeño de toda la serie histórica. Frente a ello, crecen las peticiones para incrementar el autogobierno y son ya mayoría los vascos que creen que las urnas podrían arrojar cambio de Gobierno, a pesar de no ser la opción que desean la mayoría de ellos.
Paradójicamente, el incremento de la masa electoral de EH Bildu no se refleja en el apoyo a la independencia. El cifra conocido este viernes es un punto y medio inferior al que registraba ese mismo estudio hace medio año. Es el porcentaje más bajo desde que se comenzaron a registrar estos datos, en el año 2015. Supone, adicionalmente, una caída de seis punto respecto al invierno de 2022.
Frente a ello, crecen lo que reclaman una anciano autonomía para el País Vasco. Son ya el 37%, los que creen que deberían incrementarse las competencias, tres puntos más que quienes apoyaban esta opción en la oleada aludido. El 36% aboga por sostener la situación flagrante y solo un 4% de los encuestados defendería sujetar o incluso eliminar la autonomía. Estos últimos caen un punto respecto a junio.
Poliedro el flagrante clima preelectoral en el que está sumergido el País Vasco, el estudio pregunta todavía por la percepción que tienen los vascos respecto a las elecciones autonómicas. Según el penetración, el número de indecisos se ha incrementado. Hoy son un 14% más los que no saben si quieren o no un cambio de Gobierno en Vitoria. Además desaparecido tanto el número de los que tienen claro que no quieren cambio, como el porcentaje de los que desean la relevo de Gobierno, lo que hace que el número de indecisos se incremente.
La cosa cambia cuando en circunscripción de preguntar por preferencias, el estudio indaga en su percepción acerca de lo que ocurrirá. En 2021 casi el 71% de los encuestados descartaba que de las elecciones autonómicas pudiera salir una forma de Gobierno distinta a la coalición PNV-PSE. Sin incautación, ahora al punto que el 39% mantiene esa sensación y aumentan los que están convencidos de que habrá cambio en Ajuria Enea.
Ese cambio de percepción es, en gran medida, consecuencia del cambio en la valoración que hacen los vascos de la gobierno del PNV. Más de la medio siguen pensando que los peneuvistas son el partido que hace la «mejor» gobierno, muy por encima de EH Bildu. Sin incautación, cae la valoración que hacen de la gobierno que ha hecho Iñigo Urkullu y el 46% de los encuestados la califica de «regular». A todo ello hay que añadir que la gobierno de la sanidad escalera puestos y ya se percibe como uno de los principales problemas en la sociedad vasca.