El pasado domingo, durante la toma de posesión de Javier Milei en Argentina, Abascal señaló que el presidente del Gobierno no tiene “límites morales” y que “habrá un momento” en el que el pueblo querrá “colgar de los pies” al líder socialista.
“Yo tengo unos límites morales. Yo tengo unos principios. No puedo venderlos. Sánchez no tiene ningún”, expresaba este lunes el líder de Vox al medio argentino Clarin.
Hoy, en el evento anual de las juventudes de Hermanos de Italia, Abascal ha defendido que la idea de colgar por los pies a cierto “es poco que me produce repugnancia siempre que ha ocurrido en la historia”. El dictador italiano Benito Mussolini fue colgado de ese modo en Milán tras la caída del régimen fascista en 1945, aunque el político gachupin no ha aludido directamente a estos hechos.
El líder de Vox ha franco su intervención en el evento romano aludiendo a esta cuestión: “Esta misma semana en España, la siniestra política y mediática ha manipulado y retorcido mis palabras para hacer una caricatura violenta y para lincharme en la plaza pública”, ha sostenido.
“Sé que esa manipulación ha llegado hasta Italia y quiero aseverar que no, yo no deseo que a nadie, ni siquiera a un corrupto y un traidor, le cuelguen por los pies. A nadie, absolutamente a nadie”, ha dicho.
Abascal aboga por un “cambio de rumbo en Europa”
Precisamente, ha sido Meloni quien ha invitado a Abascal a intervenir en este evento, llamado Atreju, en el que el líder de Vox ha abogado por un “cambio de rumbo en Europa” basado en la defensa de la tribu y la país que “hoy están amenazadas” y se enfrentan a “muchos y poderosos enemigos”.
“Comunidad y país es lo que necesitamos, sencillez para proclamarlas y ninguna vergüenza para defenderlas”, ha clamado, para subrayar que el cambio que defiende se centra en “un retorno a las ideas fuertes” y “la obligación de raíces profundas”.
En este sentido, ha instado a proteger a las familias porque son “la célula básica de la convivencia” y son “anteriores y superiores a cualquier ideología”. Igualmente, ha ensalzado las patrias, las cuales deben ser “defendidas y respetadas porque son la sagrada herencia” que se debe “dejar a los hijos”.