“Ahora tenemos una ocupación superior al 90%, y a partir del día 25 estamos al 95%, llegando al 100% para Nochevieja“, señala Antonio Hernández, subdirector del Hotel Costa Meloneras.
Las navidades son las fechas más caras del año, y incluso las más demandadas. La incertidumbre de fin de año es la más cara de todas. Tener lugar la Nochevieja en un hotel de cuatro o cinco estrellas con la cena incluida cuesta de media unos 500 euros por persona. Los ‘resorts’ de las zonas más turísticas ofrecen cena de elegancia con cotillón y fiesta para sus clientes llegados de todo el mundo. Los turistas del finalidad de Europa, inmediato con españoles procedentes de toda la península, son los más habituales en estas fechas.
Los hosteleros esperan con ganas las navidades, para guatar sus restaurantes y terrazas, muchos de ellos sin mesas libres ya prácticamente hasta final de año. La mayoría necesitan alentar personal: “La empresa ha tenido que alentar con seis personas más”, cuenta Kevin, camarero de una pizzería en Playa del Inglés, Gran Canaria. El dueño del restaurante El Capitán, en la Playa de San Agustín, nos explica que todavía le quedan algunas mesas para estos días porque la concurrencia ahora hace más reservas “de última hora” que antaño. “Nosotros en la cena de fin de año incrementamos un poco los precios por todos los extras que conlleva”, dice Paco.
Los turistas están encantados con los grados que marca el termómetro: “Llegamos ayer de Girona con un frío, dos o 3 grados, y llegas aquí y hay 25. Es una maravilla, yo me voy a venir a morar aquí”. “Esta tarde a la piscina, y mañana a la playa“, dice sonriendo otra chica desde la terraza de un hotel. Un turista francés, que toma el sol en Playa del Inglés nos chapurrea en castellano: “Canarias en diciembre es el paraíso”. Y es que con sol y temperaturas veraniegas en pleno diciembre, todos coincidan, porque por poco las llaman “las Islas Afortunadas”.