Un herrero instaló su forja en el centro de Madrid para rehacer a la antigua rutina el esbozo del siglo XVIII de las estatuas
Hace cuarenta primaveras, en un judería de Santiago de Compostela, una fragua embelesaba a un peque cada vez que volvía del colegio. En su tribu había ebanistas por parte de padre y canteros en la rama materna, pero nadie que pegara martillazos al rojo vivo. …
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