El corregidor reitera que habrá un sistema compuesto en la recogida de basura que «incluya contenedores fijos, contenedores de quita y pon y algunos lugares en los que pueda restar alguna bolsa, pero de carácter inusual»
Siete meses luego del nuevo gobierno particular en Toledo ya hay 42 calles en el Casco Histórico «en las que ya no se depositan bolsas de basura en el suelo«, según ha dicho orgulloso, durante su balanceo de gobierno, el corregidor de Toledo, Carlos Velázquez. Y eso que «nos decían que iba a ser irrealizable rematar con el bolseo en el Casco Histórico».
Tras 20 abriles, «había llegado el momento de cambiar esta forma de recogida de basuras que se había implantado en el Casco Histórico y que no gustaba a vecinos ni a visitantes y, por eso, nuestra determinación es firme y clara: rematar con el bolseo con un sistema compuesto que incluya contenedores fijos, contenedores de quita y pon y algunos lugares en los que pueda restar alguna bolsa, pero de carácter inusual».
Velázquez recuerda que en estas tres fases del software de asesinato de bolseo no hay más de 10 puntos de concentración de bolsas en el suelo en todo el Casco Histórico.
Por zaguero, el corregidor de Toledo ha afirmado que «vamos a hacer aquello a lo que nos comprometimos, y hay que destacarlo, porque nos dijeron que no seríamos capaces, y lo estamos haciendo».