Posterior pleno del año de las Cortes de Castilla y Bravo y de control al Ejecutante autonómico, aunque, según el calendario del Parlamento, las sesiones de este martes y miércoles se deberían tener dedicado al Presupuesto de la Comunidad del próximo año, que, sin bloqueo, no verá la luz al menos hasta el primer trimestre de 2024 ya que actualmente está en elaboración.
Así que, entregado que está a punto de caerse la última hoja del calendario de 2023, este lunes ha sido el momento para hacer vaivén del adiestramiento a partir de la pregunta formulada por el portavoz del Camarilla Socialista, Luis Tudanca, al presidente de la Congregación, Alfonso Fernández Mañueco: «¿Castilla y Bravo seguirá de moda en 2024?», recordando la afirmación realizada por el propio Mañueco al acelerar la asamblea.
«Pues sí, estamos de moda gracias a cosas como la educación o la atención a la dependencia», ha contestado y ya ha diligente para rememorar que mañana se cumplen los dos abriles de la convocatoria anticipada de elecciones (tras la ruptura autónomo del Gobierno con Ciudadanos) del que surgió otro ejecutante de coalición, ahora con Vox.
«Portadas negativas»
Un gobierno que ha vuelto a fijar como «útil y eficaz», con el que «seguimos incrementando derechos y creando empleo», de forma que «los hechos nos han entregado la razón».
Pero para Luis Tudanca el breviario es otro acertadamente diverso ya que si la Comunidad está de moda es «por portadas negativas» y por un 2023 que ha sido «el año de la peineta (en narración a un seña hecho por Mañueco en un pleno), el del protocolo antiabortistas, el de los discursos del odio, el de los ademanes obscenos o el año en el que se han cargado el diálogo social y mantenido cerrados los consultorios».
«Gobierno poco», ha zanjado Tudanca que, por otra parte de reprochar a la Congregación la desidia de presupuesto autonómico, deslizó los 2.800 millones de euros más que este año va a cobrar la Comunidad del Estado y concluyó con sorna: «Luego del verano azur y el noviembre doméstico ha llegado la Navidad y sigue habiendo Gobierno socialista».
Pero Mañueco todavía llevaba sus cifras preparadas frente a las «pestes que se empeña en echar», le ha reprochado a Tudanca. De esta forma, ha justificado el que «gestionamos con eficiencia» en indicadores como el de los 23 meses seguidos de crecimiento de la afiliación a la Seguridad Social, la tercera comunidad con último inflación o la líder en exportaciones.
«Castilla y Bravo está de moda por los falaces ataques de Sánchez, y vamos a estar de moda porque vamos a defender los intereses de la Comunidad desde la licencia y la solidaridad», ha insistido el caudillo del Ejecutante autonómico que ha finalizado afeando al líder del PSOE que «se ha tragado el sapo de la indulto, el de los 15.000 millones regalados por Sánchez o el pacto encapuchado. Mientras sigan con esa indigestión, nosotros seguiremos trabajando».
«Indigestión»
Igualmente el leonesista Luis Mariano Santos ha preguntado a Mañueco por la eficiencia de su gobierno, luego de los abriles de retraso (hasta 17 en el caso del conservatorio) que, según él, acumulan algunos proyectos o el hecho de que Bravo y Zamora «se desangren» en población. El presidente de la Congregación ha culpado al PSOE de la pérdida de habitantes en estas provincias por el obstrucción de las minas y se ha referido a Santos como «el señor cómplice» por los pactos que mantiene con los socialistas en instituciones.
El final mano a mano ha sido con el procurador de Por Ávila, Pedro Pascual quien ha interpelado a Mañueco por la contratación de médicos sin peculiaridad, lo que «incrementa las desigualdades entre las ciudades y el medio rural». Para Mañueco, «el único responsable es el Gobierno de Sánchez».