Núñez Feijóo tenía como objetivo incluir fuera como fuere la ley de gracia, el ‘lawfare’ y el pacto del PSOE con Bildu para la moción de censura en Pamplona entre los puntos del orden del día. Y así será. Tanto el decorado como el orden del día los ha impresionado el presidente del PP. Por otra parte de la renovación del CGPJ, Sánchez manifestó la importancia de enfrentarse el sistema de financiación autonómica y la reforma del artículo 49 de la Constitución que califica de ‘disminuidos’ a personas con discapacidad.
Cinco abriles con un CGPJ caducado
Un acuerdo entre entreambos se vislumbra casi irrealizable, quizás llegue por el artículo 49. Llegarán con una posición muy marcada y casi inamovible. Sánchez, que cedió Moncloa y el orden del día, no cederá en su posición respecto al Poder Jurídico. Los magistrados (mayoría conservadora por la reunión de Mariano Rajoy) llevan cinco abriles con el mandato caducado. El Partido Popular defiende ahora que los jueces los tienen que escoger los propios magistrados. El PSOE defiende el maniquí coetáneo. Desde la pasada reunión, Pedro Sánchez ha inculpado al PP de incumplir con la Constitución por el soledad procesal, poco que preocupa y que sigue de cerca Bruselas.
En 2022 Sánchez y Feijóo tendieron un puente que Pablo Casado tenía congelado y se reunieron para enfrentarse el soledad del CGPJ y igualmente la reforma del artículo 49. Nunca estuvo tan cerca el acuerdo. Sin requisa, saltó por los aires. En abril de 2022 Feijóo descongeló el diálogo pero mantuvo su posición. Cuando el entonces presidente del Poder Jurídico, Carlos Lesmes, dimitió y comenzó un periodo de crisis institucional, entreambos se reunieron el 10 de octubre de 2022.
Parecía que estaba más cerca que nunca. Entraron al partido Félix Bolaños y Esteban González Pons, que se sumaron al combate. Cuando casi estaba cerrado el acuerdo PSOE-PP, se rompió el diálogo. Los barones del Partido Popular aconsejaron el 27 de octubre a Núñez Feijóo romper la negociación. Ocurrió bajo el contexto en el que varias publicaciones apuntaban a que el Ejecutante planeaba humillar las penas de sedición. Y hasta el día de hoy.
Perdón y pacto con Bildu
El Gobierno de coalición saco pecho de la antedicho reunión y celebra los datos económicos, avances sociales y las políticas de protección social en un contexto de crisis e incertidumbre. Sánchez recuerda que todavía queda mucho por hacer y mientras, acusa al Partido Popular de no tener tesina de país. Señala que Feijóo vive en un disgusto permanente y le acusó de “sacudir las calles”. Mientras, la ley de gracia continúa con sus plazos para ver la luz. Una norma que ha colocado al PP en una competición dura.
Tanto PP como Vox afirman que la ley de gracia es anticonstitucional. El PSOE les emplaza a esperar la resolución del Tribunal Constitucional (TC), que tiene la última palabra. La ley, pactada con Junts per Cat y ERC, es otro de los puntos del orden del día. Los socialistas defienden que tendrá un carácter conciliador y reparador. La derecha dice que es otro cuota al independentismo para hacer a Sánchez Presidente.
Si las sesiones de control al Gobierno iban a ser tensas, la competición elevó el tono tras conocer lo ocurrido en Pamplona. El Partido Socialista ha pactado con EH Bildu una moción de censura contra UPN en el Comunidad. El cayado de mando en la renta navarra recaerá en la formación abertzale. Núñez Feijóo comentó que era el “pacto más miserable de todos los que ha suscrito Sánchez”. Figuras del Gobierno como Óscar Puente, ministro de Transportes, o Nadia Calviño, vicepresidenta primera, explicaron que estos pactos son normales en democracia.
Una táctica “demasiado arriesgada”
Por su parte, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, califica la táctica del Partido Popular como “demasiado arriesgada”. Acusa a Feijóo de estar “rompiendo con la institucionalidad”. La líder de Sumar considera que está “en las líneas de ser antisistema” por exigir que su reunión de este viernes con Pedro Sánchez se celebre en el Congreso de los Diputados y no en el Palacio de la Moncloa, como viene a ser lo habitual para este tipo de encuentros.
Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo cierran este 2023 con una reunión. El líder socialista celebra que acabe como su antedicho reunión antaño de las elecciones del 23J. Uno como presidente del Gobierno y otro como líder de la competición. Sin acuerdo a la tino, se prevé una incómoda cita antaño despedir el año.