Sheila, sobre su hijo de 5 años con autismo y su perro de asistencia: "El amor no necesita palabras"



El autismo es un tipo de trastorno del explicación neurológico que dificulta y afecta de modo directa a las interacciones sociales y, en ocasiones, a la comunicación. Esta condición acompaña a la persona a lo dispendioso de su vida.

El TEA (Trastorno del Espectro Autista) se suele detectar a los 3 abriles, aunque hay casos en los que se puede dar una identificación más temprana. Asistir a terapia con ellos es una buena modo de estimular sus procesos de enseñanza y de explicación, en determinados ambientes a los que les cueste más adaptarse.

De esta modo, la terapia con animales es una opción muy reclamada actualmente. Los perros de subsidio se convierten en el mejor amigo del párvulo, una figura fiel e incondicional con la que generan un gran vínculo.

Se sienten comprendidos, no les juzgan, aumenta su nivel de autoestima, ayudan a que el párvulo se sienta cómodo en determinadas circunstancias… en definitiva, les ayuda a sentirse seguros en sí mismos.

Cada párvulo con autismo es diferente. Este viene traumatizado por distintos patrones de comportamientos y aptitudes que hacen que salten las alarmas de los padres, como fue el caso de Sheila. Desde torrevieja news today Informativo, hemos hablado con ella.

Testificación

Sheila tiene 28 abriles. Su sueño siempre había sido ser superiora novicio, lo describe como “una ilusión”. A los 23 abriles, tuvo a su hijo Asier. Cuando el pequeño tenía tan solo unos meses, su superiora comenzó a sospechar de algunas actitudes que mostraba y que no eran acordes a la época.

Con 7 meses, su superiora asegura que era “un diagnosis asaz claro”. Ella fue cayendo en la cuenta y sospechando de la condición y se lo empezó a transmitir a su comunidad, acudió a neurólogos y preguntó a médicos para memorizar qué pasaba. En ese momento, ella no conocía el significado de autismo.

“Nos dimos cuenta muy pronto, pudo ser mi instinto de superiora”

Sheila, superiora de un párvulo con autismo

“Asier nunca me miraba a los fanales, no tenía sonrisa social, no se giraba cuando le llamábamos… esto es poco que hacen todos los bebés cuando ven a sus padres y el nuestro no lo hacía”, explica Sheila.

El pequeño fue diagnosticado en época temprana, tan solo tenía 1 año cuando los médicos se lo transmitieron a sus padres y, a pesar de que hasta a los 2 abriles no le dieran un diagnosis oficial, “sus síntomas eran claros”, confiesa su superiora.

Asier tiene cargo 3 de autismo, considerado como severo por ser no verbal y por tener determinados niveles de dificultades, según nos ha relatado su superiora.

Solo hay que conocerlo, acercarse para entender sus formas de entender el mundo y poder ponérselo obvio.

Sheila

Cuando le preguntamos a Sheila cómo definiría el autismo y qué ha supuesto esta discapacidad para su hijo, confiesa que no sabría por donde iniciar: “Es poco muy desconocido de primeras, tenía mucha desidia de información”, y continúa diciendo que “se entiende como autista el párvulo que está solo, que no quiere relacionarse y para cero es así, mi hijo tiene autismo y es la persona más cariñosa del mundo. Yo diría que el autismo es muy duro, pero que es un constante enseñanza“.

Aparición de Prosa a la comunidad

Uno de los tipos de comportamientos que tiene el pequeño Asier son las fugas, solía escaparse con regularidad. Su superiora, Sheila, asegura los paseos que daban por Salamanca (donde residen), se convertía en una auténtica pesadilla.

Todo lo que le llamaba a él la atención era salir corriendo y eso ocasionaba mucho peligro. No tiene percepción de si pasa un coche o poco”, explica ella.

A raíz de estos momentos tan tensos, Sheila decidió indagar y comenzar a inquirir ayuda hasta que dio con Kuné, una asociación especializada en el entrenamiento de perros de subsidio para menores con TEA y personas con movilidad estrecha.

Explica que su hijo Asier, al tener autismo, le cuestan mucho las interacciones sociales con niños. Sin requisa, con los animales y en exclusivo con los perros, siempre ha sido una encanto anciano.

Los perros son la compañía mas fiel que se puede tener en el mundo, no juzgan ni tienen prejuicios

Cuenta la superiora de Asier

Sin dudarlo, se puso en contacto con la asociación y Prosa, una hembra Labriego de 2 abriles, llegó a su casa.

Los niños con TEA suelen ser asaz metódicos y la aparición de un nuevo miembro a la comunidad puede parecer un trastorno para ellos. Sin requisa, no lo fue para Asier: “La interacción ha surgido sola, Asier es un párvulo muy sensorial, le atrae absolutamente todo. La conexión con Prosa es una amistad muy pura en la que no entran palabras”.

Evitar las fugas

Según explica Sheila a torrevieja news today Informativo, Prosa es un perro de subsidio que va a ayudar a Asier a no tener esas fugas. El método que se usa para ello es que el pequeño va anudado al animal durante los paseos. En cuanto ella nota que el párvulo tira, ella se sienta o se tumba.

El primer paseo que dieron entreambos fue en Madrid, donde tiene la Asociación su sede. Según hemos podido conocer, Kuné entrena a perros y ellos se adaptan a las deyección del párvulo. “Como si fuera un perro personalizado“, dice.


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    <p class="image-footer"> Primer paseo por Madrid de Asier y Prosa
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Es representativo las fugas, los trastornos de sueño, de víveres, crisis, autolesiones… estos perros abarcan todas estas cosas y no solo las interacciones en casa, sino que igualmente acompañan a los niños fuera.

Pensar en el futuro

Para Sheila, pensar en el futuro de Asier con el autismo es poco muy incierto, aunque está confiada de que puede ir a mejor en muchos aspectos, tanto de calidad de vida como de comportamientos.

“Creo que prosa le puede aportar tranquilidad, seguridad, interacción… al final es un amigo y cuando van juntos, aunque no me lo pueda verbalizar, es un párvulo muy expresivo y sonríe mucho y está eficaz desde que está Prosa en casa“, confiesa confiada.

En la comunidad solo se encuentran positivos con la aparición de la mascota a su hogar que se ha llegado a convertir en uno más. Tras conocer su historia, nos hemos llegado a proponer qué puede lograr a advenir cuando Prosa no esté con ellos en unos abriles por el cachas vínculo que se ha generado entre los dos. Luego de preguntarle a Sheila, nos dice que prefiere no pensar en ello.

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<figcaption>Prosa, perro de subsidio de Asier y Sheila | torrevieja news today Informativo</figcaption>

Como explica, su hijo Asier no puede expresar con palabras sus emociones, por lo que llegado el momento de que fallezca, todo son dudas: “Imagino que, como los demás, tiene sentimientos y le parecerá raro que de repente no este su presencia. Su compresión es muy limitada, pero por ahora queda mucho tiempo y mucho que trabajar”.

“Una discapacidad que no se ve”

Sheila describe que el autismo es una discapacidad en la que desidia mucho que trabajar de cara a la sociedad y al conocimiento que se tiene de ella.

Son muchos los niños y adultos que sufren alguna incapacidad. Síndrome de Down, ciegos, parálisis mental… en todos ellos en comparación hay un indicador que marca proporcionadamente la diferencia. Estos muestran rasgos fácilmente perceptibles y a simple sagacidad reconocibles mientras que el autismo no.

La multitud se cree que son niños caprichosos y consentidos

Sheila

Sheila asegura que en Salamanca no han tenido ningún problema, pero que siempre hay cierto que se les queda mirando si Asier, en algún momento poliedro, se comporta según su discapacidad.

Poco que confiesa y verbaliza como muy duro: “No deberíamos dictaminar a ningún padre o superiora en ninguna situación de rabieta de su hijo. Las personas con autismo tienen crisis porque el mundo les supera, recibimos comentarios de ‘yo le daba una cachete’, ‘ ese niños está maleducado’… y comentan y critican sin memorizar que detrás hay una discapacidad”.

Acertadamente es cierto que Sheila señala que la multitud suele portarse proporcionadamente con ellos. Recuerda una cuento donde sí que se les pusieron impedimentos, esta se dio cuando ya contaban con la ayuda de Prosa para estar en la calle con Asier: “Alguna vez me han dicho que no podemos entrar al sitio porque no ven qué discapacidad tiene. Cuando ocurre, nos toca pararnos y explicar lo que sucede y por qué mi hijo va anudado al perro y acompañado con Prosa a todos lados”.

Al autismo le hace desidia mucha visibilidad

Tras conocer su historia, Sheila pide que se le dé más visibilidad a esta discapacidad. Confiesa que tan pronto como se tienen ayudas y que son cientos las terapias que los niños con TEA necesitan.

¿Dónde está el autismo en los medios?

Sheila pide que la multitud se conciencie más sobre esta condición que como su pequeño Asier, de 5 abriles, igualmente sufren otras muchas personas. Reclama que ellos igualmente merecen los mismos derechos y que no se les juzgue tanto para, en su área, cobrar más apoyos.

“Queremos tener la oportunidad de dar voz para que se oiga el autismo, una discapacidad muy complicada para las familias”, comenta Sheila.

Uno de los problemas que se encuentran las familias son la dificultad de consentir a centros de ocio. Asegura que le resulta muy complicado ir al cine, al teatro, a un concierto, planes a los que van niños de su época. “Las cosas que hacen los niños de 5 abriles yo no puedo hacerlas con Asier, por no susurrar de la desidia de apoyos en el trabajo, la conciliación general o la desidia de apoyo en los centros educativos“, lamenta.

Por ello, amplia su testificación pidiendo un valía a la sociedad: “Que se oiga el autismo, que se vea esta discapacidad y lo que ello conlleva. Deberíamos hacernos hueco en los medios de comunicación y concienciar sobre el autismo y que los niños que lo sufren y sus familias necesitan ayuda social“.

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