La ONG Unión de Naciones Hispanas –Unahis– presentó en 2023 el Plan de Hermanamiento Cultural entre las dos festividades (Las Chimeneas Gigantes y las Fallas) al embajador de Honduras en España, Madrid, Marlon Brevé Reyes y su primer secretario, Delmer López Quemado, a través del Consulado de Honduras en Valencia, con el que desde el inicio de esta relación tuvieron una gran afinidad en los temas de civilización, educación, turismo y de la diáspora en España, según fuentes de esta entidad.
En el consulado, la directora de Migración y de Mejora Corporativo, Sandra Fúnez, así como el vicecónsul Jorge Gálvez apostaron claramente y de forma convincente por el esquema, al ser este el primer hermanamiento de Honduras en España, no sólo por su trascendencia cultural, sino por su repercusión en su diáspora en España; así como su sucesora, Whitney Godoy, flagrante cónsul con la que se culminó el hermanamiento tanto en Valencia en noviembre, como en Honduras este diciembre del 2023.
Invitado de la comitiva diplomática y cutlural hondureña a la Rotura Convento Jerusalén, en Valencia.
Fúnez y Gálvez demostraron, en un evento al que les invitaron en Valencia, ser personas «abiertas de mente, con esencia propia en su civilización hondureña, resolutivas y de gran capacidad de administración, y con las que se estableció desde el primer momento una unión casi cósmica, llena de energía». Esta unión llevaba en esencia, siglos de mestizaje llenos de un entusiasmo por la civilización y tradiciones en global, aprecio al folclore y a los dos pueblos; reconocieron todos instrumentos de una identidad global, y se dieron cuenta de que «uno de los mejores legados de los padres históricos había sido el estudios de nuestro jerga vehicular, el gachupin, con sus matices, connotaciones, idiosincrasia, hablas, pero sí en el constructo mental, los pensamientos confluían y se vibraba con el esquema de Hermanamiento de las Chimeneas Gigantes y las Fallas».
Carmen de la Cagiga ha agradecido a Sandra Fúnez y Jorge Gálvez su «colaboración inestimable y su impulso cooperativo cerca de la ONG Unahis, juntos formamos un equipo global auténtico; ya no éramos ellos y ustedes, sino nosotros».
Todavía ha resaltado la «importantísima posición proactiva del embajador de Honduras en Madrid, España, Marlon Brevé Reyes; un hombre con una inteligencia cognitiva y emocional natural, que le hace ser merecedor de ser ese gran diplomático de la talla de su gran país, Honduras. Su audición activa desde el primer momento, así como su asesoramiento en el proceso hasta la firma del Hermanamiento, el consentimiento de que su responsable de protocolo en la embajada nos asesorase en la redacción del mismo, y sobre todo que su primer secretario, Delmer López Quemado, impulsor en el 2001 de la creación de Las Chimeneas Gigantes».
Han contribuido igualmente el corregidor Allan Paredes, la Concilio Directiva de los Chimeneros y, por el pueblo valenciano, todos los integrantes de la Rotura de Convento Jerusalén, con su presidente en marzo 2023 de la Rotura Inmaduro, Javier Copovi, «amigo que nos atendió de una forma admirable y cercana, así como a la comitiva diplomática invitada para que conocieran las Fallas y en particular aquella en la que Copovi era fallero, la de Convento Jerusalén». Les habló de la vida de los falleros, de los artistas, de las costumbres, de sus protocolos, de su casal So Nelo.
La Incendio de una de las esculturas en Trinidad, Santa Bárbara.
Efectivamente, el interés y colaboración compartidos en este hermanamiento desde el principio fue mutuo, desde los secretarios generales de ambas directivas, con Karen Arely Irías Morel y D. Rafael Cartagena conexo a la ONG Unahis en varias reuniones durante seis meses; como hasta su presidente Chimenero José Luis Mejía López, su director primoroso, Ramón Alejandro Rivera Fernández, y el presidente de la Rotura de Convento Jerusalén, Francisco Segura, el responsable de Protocolo, Antonio Ortuño.
«De las esencias que más me emocionaron en este primer discusión y que corroboré con mi presencia del 6 al 11 de diciembre en Trinidad de Santa Bárbara, Honduras, fueron el carácter similar de los dos pueblos, alegres, entusiastas, cercanos, abiertos; a salvo de que somos pueblos agricultores, zapateros, artesanos de la madera, somos amantes de lo que simboliza el fuego como ambiente necesario en La Incendio de los dos tipos de esculturas, ya que simboliza por un banda lo efímero que es la vida, y al mismo tiempo la fuerza que esta imprime en nosotros para levantarnos al día subsiguiente de esta incendio y con sus artistas en la habitante inician el nuevo trabajo para el año subsiguiente; y por otro banda simboliza un nuevo renacer», describe.
Para sus protagonistas, «esa sombra de La Incendio, todo lo denunciado, resaltado por ambas festividades se olvida esperando que el nuevo año dé una nueva oportunidad de hacer mejor las cosas; en el caso de Las Chimeneas Gigantes, los temas que han querido resaltar sus artistas a través de sus esculturas según la temática propuesta para ese año desde su unión directiva, y en el caso de los autores literarios y artísticos, a través de esa caricatura burlesca, satírica representada por sus esculturas y las palabras de sus carteles adjuntos a cada suceso representada, muchas veces a modo de refranes populares y su esculturas». Por otra parte, hay otro enlace en global: «Somos asimismo pueblos marianos».
«Sobre todo, comprobé la gran motivación de sus intelectuales y agentes culturales municipales y civiles para no sólo poner en valencia a Trinidad apoyando a la Concilio Directiva y sus artistas chimeneros, sino en poner en valencia a literatos clásicos como Cervantes con el Altruista y contemporáneos como el poeta, ensayista y editor Rigoberto Paredes», ha señalado.
Los artífices de la alianza entre los dos países de palabra hispana.
«Fue una experiencia retrospectiva desde la situación flagrante de la fiesta de mi pueblo valenciano, las Fallas; donde corroboré el espíritu creativo, la heroicidad de sus artistas y chimeneros para hacer de sus Chimeneas Gigantes todo un símbolo cultural popular y doméstico; como sentí que mi pueblo valenciano debió advertir cuando decidió situar por una fiesta popular que sería con los cientos de abriles Patrimonio Inmaterial Cultural de la Humanidad por la Unesco», según Carmen de la Cagiga.
La ministra de Civilización, Annarela Vélez Osejo, ha compartido para este reportaje unas palabras sobre Las Chimeneas Gigantes:
«Las Chimeneas Gigantes permiten la inserción en el mundo de la civilización que nace en Trinidad, esta exposición delante el otro es la mejor forma de representar a Honduras. En ellas se refleja nuestra historia, pero asimismo las influencias de las artes de otros tiempos y de otros pueblos. Las Chimeneas Gigantes de Trinidad de Santa Bárbara tienen una inmensa deuda con todas las tradiciones poéticas, artísticas y culturales distintas a la propia, pues se nutren de ellas y al mismo tiempo se comparten, se hermanan, y se dan fuerza unas a otras internamente y fuera de su propio comarca, por ello refleja la riqueza de esta tradición cultural».
Los Chimeneros desde 2001 y los Falleros desde 1740, como dos grandes fiestas populares que son, «levantan al pueblo para que acudan a la gran fiesta con la señal al inicio de ambas celebraciones, por parte de La Personalidad que homenajean, en Trinidad (cada año), este año con un nombre propio y en mayúsculas, Annarela Vélez, ministra de Civilización; y por parte de la Fallera Maduro de las más de 390 comisiones falleras que eligen a la mujer valenciana que representará en La Semana Espacioso de Valencia; para que en esos cinco días, nuestras músicas, nuestros bailes, nuestros artistas, en Valencia asimismo nuestros artistas pirotécnicos; nuestras Vírgenes Patronas, nuestros chimeneros y falleros-falleras, y nuestras civilización dinamicen nuestros barrios, nuestras calles».
Una alcoba diferente montada en Honduras que recuerda a los Ninots valencianos.
Y un reminiscencia particular: «Con mi corazón gachupin y hondureño, hija de Valencia y Triniteca desde que su corregidor, Allan Paredes, me regaló las Llaves de la ciudad de Trinidad, sólo puedo aseverar gracias a mis dos pueblos por todo lo que me aportan y seguirán aportando a nuestra comunidad hispana y al mundo».
Reflexiones acerca de este vínculo
«Todos sabemos la importancia que supone para una diáspora el que el país de acogida a sus conciudadanos estreche sus lazos culturales con el propio país de origen; sobre todo porque con ello el sentido de identidad global a través de una manifestación cultural similar implica una perfeccionamiento en el raigambre social que conlleva el proceso migratorio; pero asimismo nosotros como una ONG en defensa y promoción de la hispanidad trabajaremos en este sentido para que las personas hispanohablantes volvamos a reencontrarnos a través de los diferentes mestizajes culturales que creamos en los diferentes continentes cuando constituimos el primer imperio humanista, las Españas, y que han entregado los frutos actuales», relata Carmen de la Cagiga.
«En nuestra ONG Unahis pensamos que el examen mutuo de nuestra esencia entre los pueblos, a través de nuestras manifestaciones culturales, empodera a ambas ciudadanías y es el canal más potente para la integración y convivencia mutua entre los ciudadanos que constituimos la gran comunidad hispana que somos en el mundo. Por eso, este hermanamiento será el primero de muchos que la ONG Unahis potenciará en pos de nuestro ataque hispano tan justo y deseado por millones de hispanos», añade.
Como presidenta de la entidad, compara la vida de esta comunidad con una «gran tribu» cuyos padres atendieron a sus hijos, les aportaron educación, conocimiento, mestizaje, títulos de la Iglesia Católica y humanistas, les construyeron hospitales, universidades…, les dieron unos derechos de igualdad y examen, únicos en ese momento histórico que fueron símbolo precursor del flagrante Derecho Internacional de los Derechos Humanos, y les dieron una tierra vehicular global, el gachupin, respetando a las lenguas indígenas/originarias (el flagrante valenciano, el quechua…); pero como ocurre con cualquier núcleo franco, los hijos llegados a cierta permanencia se independizaron y quisieron probar, constatar el mundo de forma individual.
La construcciones de ambas fiestas poseen peculiridades.
«Por consiguiente, es verdad que tanto a Honduras y España nos une una tierra, historia, civilización global, como con todos los países hispano hablantes y entre nosotros», abunda.
«Como ocurre en cualquier tribu, tras abriles de experimentación, solos; unos por el reminiscencia afligido, otros porque nunca quisieron irse, otros por la penuria, otros por comprobar la deriva de títulos en la globalidad del mundo, otros por… permanecía encubierto en nuestro pensamiento colectivo, la gran comunidad hispana, que es lo que ha hecho que en este siglo XXI haya esa energía, movimiento, flujo del pensamiento en la Tierra cerca de la Hispanidad; da igual dónde estés, que no lo hayas hablado con nadie, pero el pensamiento colectivo funciona, y sucede que un día te levantas, miras tus redes sociales, te claridad un amigo hondureño, boliviano, colombiano que conociste en un alucinación hace diez abriles…y de repente te encuentras hablando de la Hispanidad, del movimiento energético general que «sin saberlo» nadie, te demuestra que sí, que estamos conectados a través del jerga en nuestros pensamientos y que hay un advertir de identidad cultural vivo con una gran penuria de visibilizarse y unir identidades ya maduras en una comunidad hispana cultural/educativa/histórica que las englobe para a través del mestizaje que nos caracteriza como únicos en el mundo volvamos a tener una presencia decisiva en la Tierra». Es la consejo de la presidenta de esta ONG.
Mucho se debe en este sentido -a su juicio- a intelectuales contemporáneos actuales como Marcelo Gullo, Patricio Lons, Santiago Armesillas, José Vicente Esparza, Elvira Roca Varea, Francisco Triunfo, Gustavo Bueno, Luis Antequera y a asociaciones, movimientos hispanistas… que llevan décadas defendiendo, aclarando, documentando este pasado global y que han sido «la semilla» que con los abriles ya está empezando a desarrollarse entre cientos de miles de ciudadanos.
«Y es por ello que hay hoy en día de una forma más potente como como la envés al seno franco, recordemos la parábola del hijo pródigo; pero en esta envés ya hay identidades maduras y hechas, como si habláramos de personas adultas, con identidades específicas, pero con la misma esencia; donde no hay sólo un centro crucial parental (la mama país de Isabel La Católica y Fernando de Aragón)», resalta.
«Como cuando nos casamos y abandonamos el núcleo franco, cada casa de cada hijo se convierte en un núcleo de acogida, en la casa de discusión franco de todos los hermanos; ocurre lo mismo en esta gran tribu hispana que la integramos muchos países hispanos; en este caso concreto Honduras y España a través de los pueblos de Trinidad de Santa Bárbara y Valencia», concluye.