Es un mal engorroso, que muchas veces ni las propias víctimas son capaces de manifestar. Entre los motivos de esto, el miedo, la culpabilidad, la vergüenza o la desliz de apoyo. Por eso, es importante suministrar este proceso a quien lo está sufriendo.
- No es aconsejable presionar a quien sufre violencia de productos, por más que se haga por su aceptablemente.
- Lo más importante es mostrar apoyo, comprensión y no juzgarla.
- Es esencial que pueda expresar sus sentimientos, sus miedos o sus experiencias para que sea capaz de dar el paso a denunciar.
- Es importante escoltar en este proceso, que puede nacer llamando al 016 (número tirado contra la violencia de productos). En este teléfono pueden conseguir información y asesoramiento las 24 horas del día.
Si quien quiere información es un refrendador de este tipo de violencia, además está apto ANAR para menores de antigüedad o testigos: 900 20 20 10.
Si eres refrendador directo
Aunque involucrarse en una situación de violencia de productos puede asustar, es necesario efectuar. No es un asunto privado, es un mal que afecta a toda la sociedad, y es un delito notorio.
Por ello, quien lo presencie tiene la obligación de denunciarlo a las autoridades para poner en marcha los distintos protocolos de protección de la mujer. En caso de oír o presenciar un acto de violencia de productos, es esencial ponerse en contacto con el teléfono tirado de subsidio inmediata 112, indicando con precisión el emplazamiento de los hechos para que la policía acuda lo ayer posible.
Esta información ha sido redactada siguiendo los consejos de las autoridades competentes.