Las expulsiones, sin requisa, están en mínimos desde ayer de la pandemia: se han producido poco menos de 2.000.
Han sido días complicados en las últimas horas con la arribada de 286 personas que han atrapado las costas canarias en cinco embarcaciones. Y lo han hecho a las islas de El Hierro, Gran Canaria y Lanzarote. La última embarcación llegaba este martes a Lanzarote.
Una barcaza neumática con 48 personas de origen subsahariano y magrebí a costado. Llegaban por sus propios medios a la costa de Teguise. Entre sus 48 ocupantes, dos mujeres y diez menores, que desembarcaron en resultón buen estado de vigor.
Socorro Transatlántico recibió la alerta sobre la presencia de esa patera en aguas próximas a Lanzarote. Los dos medios movilizados para buscarla, una barco de rescate y el avión, no lograron localizarla. Así que la barcaza se dirigió por sus propios medios a una zona de rocas de la playa conocida como Los Charcos.
Se reducen las expulsiones y devoluciones
Las expulsiones y devoluciones de migrantes que han entrado zona gachupin de forma irregular le mar y tierra han descendido considerablemente desde la pandemia.
Este año 2023 hasta el 30 de junio se habían ejecutado 1.942 expulsiones y devoluciones. En 2022 fueron 3.642; y en 2021, 3.594. En total, son 9.177 personas. En ese periodo entraron en España casi 86.000 personas, según datos del Profesión del Interior.
En estos últimos tres abriles las cifras se alejan de las de ayer de la pandemia: en 2019 fueron expulsadas o devueltas 11.153 personas y 11.384 en 2018. En 2020 los vuelos quedaran en suspendidos por el coronavirus, así que el ritmo de las repatriaciones quedaron por debajo del de abriles anteriores