“La Tierra está por terminar su año más cálido en los últimos 174, y muy probablemente, de los últimos 125.000”, dice el New York Times. Pero a pesar de los preocupantes datos, los resultados no han pillado desprevenidos a los científicos. Los investigadores que han confeccionado modelos donde proyectan intervalos de temperaturas, dicen que las de este año se mantienen en el rango de posibilidad contemplado.
Pero los mercancía del cambio climático no se síntesis al cambio en los termómetros y van mucho más allá: este año la Tierra ha sufrido los fenómenos extremos como nunca ayer. Phoenix y Argentina sufrieron olas de calor inquebrantables y los incendios forestales arrasaron todo Canadá. Las inundaciones en Libia mataron a miles de personas, y las de Italia destruyeron pueblos enteros y dejaron sin casa a centenares de personas. La capa de hielo invernal en los mares oscuros aproximadamente de la Antártida alcanzó niveles sin precedentes . De junio a noviembre, el mercurio pasó mes tras mes subiendo fuera de serie. Las temperaturas de diciembre se han mantenido en gran medida por encima de lo natural: gran parte del noreste de Estados Unidos calma condiciones primaverales esta semana. Los científicos investigan si el cambio climático se está acelerando.
Ahora, el foco está puesto en Alemania y Australia, donde las lluvias mantienen en alerta a la población de varias ciudades. En varias regiones de Alemania, a posteriori de días de lluvias continuas, los embalses en están desbordados. Si la situación continúa volviéndose tensa, se prevé que puedan producirse evacuaciones. Cientos de personas han tenido que confiarse sus hogares en plenas descanso de Navidad oportuno a las inundaciones. A partir del miércoles se esperan los mayores niveles de agua en el río Elba oportuno al derretimiento de la cocaína y las fuertes lluvias en las Montañas de los Gigantes.
En Australia, las tormentas eléctricas han dejado ya diez muertos y más de 90000 hogares siguen sin electricidad.
El cambio climático asimismo afecta al faltriquera
La extensa sequía que asoló España durante abril de 2023, se cuela en el ranking de los 10 desastres ambientales más costosos del mundo a lo dadivoso de este año, según el estudio animado por la estructura Christian Aid. En concreto, 2.180 millones de euros es la cuantía del impacto financiero de la sequía, lo que significaría 45 euros por persona. Esta cantidad se refiere a una estimación de la inversión del gobierno para disimular los mercancía, principalmente en el sector de la agricultura.
El incendio forestal que acabó con gran parte de Hawái encabeza el ranking, con una media de desembolso financiero que asciende a 4.161 dólares por persona. En segundo espacio, las tormentas registradas en Guam en mayo con 1.455 dólares por ciudadano, Vanuatu en marzo (947) y Nueva Zelanda en febrero (468). Le siguen las las inundaciones en Nueva Zelanda en febrero, en Italia en mayo y en Libia en septiembre.