Este martes, 26 de diciembre, fue el día con el anciano número de urgencias en Castilla-La Mancha en toda su historia en la red de hospitales del Sescam, donde fueron atendidas 4.000 personas, «cosa que no había ocurrido nunca en el Servicio de Vitalidad de Castilla-La Mancha», dijo ayer el consiliario de Sanidad, Jesús Fernández Sanz.
Una elevadísima sigla que argumenta al intenso frío de los últimos días, «a que las infecciones respiratorias -que no han aparecido en los últimos meses- están apareciendo todas ahora, y el estado de vitalidad de la población compromete a que nos tengan que inspeccionar tantas personas, lo que nos ha sorprendido a nosotros mismos; un número al acrecentamiento: 4.000 personas, un número importante en las Urgencias de Castilla-La Mancha».
Lo importante para el consiliario es que este flujo de pacientes «se ha drenado acertadamente y que no tenemos grandes atascos; todos los planes de contingencia están en marcha», frente a unas infecciones respiratorias que «están en acrecentamiento entre los fríos y el anciano número de personas que nos concentramos en estas fechas». Todo ello ha comprometido a que la transmisión sea importante, «aunque además tengo que opinar que los casos de enfriamiento y de Covid de este año son menores que los que aparecieron el año susodicho. Con lo cual, aún esperamos algunas infecciones que puedan producirse en las siguientes semanas», ha señalado el consiliario.
Se ha referido Fernández Sanz a un detalle importante, el que ocurre con la población de corta etapa: «en los más pequeños, con la vacuna que hemos utilizado este año para el virus respiratorio ha habido un 75% menos de hospitalizaciones que el año susodicho».
A este asunto se ha referido además este miércoles el sindicato Satse, que ha pedido alentar los centros sanitarios para evitar saturación y sobrecarga asistencial, al igual que hizo recientemente el Colegio Oficial de Médicos de Toledo.
En la bisectriz de lo dicho por el consiliario, Satse ha capaz de que las situaciones de saturación que se están empezando a producir en los centros sanitarios por la enfriamiento y otras infecciones respiratorias adecuado a las bajas temperaturas «irán en aumento, previsiblemente, en las próximas semanas», y por ello ha reclamado que el Sescam implemente «planes eficaces de contingencia que conlleven el refuerzo de las plantillas de enfermeras, entre otras actuaciones».
El Sindicato de Dispensario ha constatado que en estos últimos días de diciembre ya se están registrando situaciones de colapso y anciano tensión en los servicios de Urgencias de algunos hospitales. «Por su parte, en los centros de vitalidad además se está sufriendo una anciano sobrecarga asistencial», ha añadido, y ha recordado que se manejo de una situación que «se repite todos los abriles una vez que las bajas temperaturas y la partida de ventilación en espacios cerrados propician que un anciano número de personas se vean afectadas por la enfriamiento, covid y otras infecciones respiratorias».
El final noticia publicado por el Instituto de Vitalidad Carlos III concluye que hay un aumento en la circulación de enfriamiento y virus respiratorios entre los casos atendidos en Atención Primaria. De igual forma, la hospitalización por enfriamiento sigue en aumento, mientras que se observan fluctuaciones al acrecentamiento en hospitalizados por covid.
«No obstante, desde las administraciones sanitarias suelen argumentar que se manejo de situaciones puntuales o ‘picos estacionales’ para no alentar y mejorar los fortuna y medios necesarios en los hospitales y centros de vitalidad», apunta Satse, que ya ha reclamado que se adopten «con carácter urgente las medidas necesarias para que la situación no se agrave en las próximas semanas».
Encima del refuerzo puntual de las plantillas enfermeras en Atención Primaria y en las Urgencias hospitalarias, la estructura sindical plantea posibles soluciones a medio y extenso plazo, como la dotación suficiente de plantillas enfermeras «que se ajusten a las ratios de los países de nuestro entorno». Así se evitaría que el mantenimiento, incluso el refuerzo, de la atención en estas fechas se realice a costa de derechos laborales, como los descansos reglamentarios y la conciliación de las enfermeras que ya trabajan todo el año con una sobrecarga asistencial permanente.
El Sindicato ha recordado que, con motivo de las fiestas navideñas, se registra una reducción generalizada de las plantillas enfermeras ya que no se cubren de forma adecuada los permisos reglamentarios, las bajas por enfermedad o las reducciones de recorrido. Satse apela a la «responsabilidad ciudadana» para evitar una anciano incidencia de la enfriamiento y del resto de infecciones respiratorias, y apunta algunas medidas preventivas como evitar el contacto cercano con personas enfermas, quedarse en casa si se está enfermo, cubrirse la trompa y la boca al toser o estornudar y lavarse las manos con regularidad.