Isabel Díaz Ayuso ha contraprogamado este miércoles a Pedro Sánchez y se ha quedado a ‘solas’ con él en presencia de los focos informativos del día. Uno en el Palacio de la Moncloa, otra en la Vivo Casa de Correos de la Puerta del Sol. La contraprogramación no se ha restringido a una coincidencia en el tiempo, sino que asimismo ha sido programática y política. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha presumido de sus rebajas de impuestos y prometió que las mantendrá el próximo año con nuevas ayudas fiscales, y ha resguardado que esta región seguirá siendo motor financiero de España, frente a un Gobierno «de ultraizquierda» que tiene como presidente a un «comunista», Pedro Sánchez.
Ayuso ha trufado su arqueo de fin de año de advertencias sobre la deriva de un presidente «comunista apoyado por independentistas catalanes y vascos que llevan a sus espaldas los más graves delitos: contra la vida, la autonomía y la pelotón de España».
«El arqueo político del año 2023 se resume en que un Gobierno de ultraizquierda ha tomado el poder para destruir la Constitución», sentenció la presidenta regional madrileña. «Nadie bueno ocurre a una nación cuando abraza al comunismo», ha alertado.
Aplausos de terroristas
Ayuso ve lamentable las felicitaciones que ha recibido Sánchez de distintos grupos terroristas y de partidos como Bildu y aseguró que ella dimitiría si recibiera algún mensaje parecido de esos grupos: «No voy a ser una presidenta a la que felicite el rama terrorista Hamás por mínimo, ni los grupos terroristas de hutíes que atacan a los barcos en el mar Rojo. Ni siquiera ningún político castellano condenado por delitos de parentesco. Si me felicitaran cualquiera de estos grupos terroristas, dimitiría. No sólo por razones políticas: dimitiría por principios».
«A Sánchez le aplauden los terroristas de fuera y los de interiormente, con los que gobierna. No hay maduro indignidad ni maduro ataque a nuestro Estado de Derecho, nuestra historia fresco ni a la verdad», ha denunciado.
Frente al Gobierno del «comunista» Sánchez, Ayuso ha ducho de que está y estará Madrid, que como «isla de autonomía, derribará el pared que está levantando la ultraizquierda con sus socios». «En presencia de quienes abiertamente avisan de que quieren destruir España estaremos nosotros, que por el contrario, queremos ofrecerle sus mejores primaveras».
Entre comunismo y autonomía, ha recordado Ayuso, en la Comunidad de Madrid se optó por la autonomía, y por «mayoría absoluta» en las últimas elecciones autonómicas. Sánchez, en cambio, se ha mantenido en el poder posteriormente de unas elecciones que la presidenta madrileña ha calificado de «anómalas», no solo por su convocatoria en pleno verano, sino por las promesas incumplidas de Sánchez y los socios que ha buscado para mantenerse en La Moncloa, con los que negociaba «a escondidas» cuestiones como la condonación, mientras aseguraba a los españoles que no se aprobaría.