La Repblica Islmica anunci este domingo su liberacin, tras ms de un ao angustioso en una de las peores crceles del mundo
La Repblica Islmica de Irn anunci este domingo la liberacin del espaol Santiago Snchez Cogedor, encarcelado en este pas en octubre de 2022 cuando fue apresado tras saludar la tumba de la provocador Masha Amini, durante un alucinación solidario a pie entre Madrid y Qatar, donde pretenda entrar para animar a la seleccin espaola. Desde su detencin, procesado de espionaje, Santiago Snchez ha vivido un incondicional calvario en una de las crceles ms duras del pas, Evin 209, en la que se person el embajador espaol en Tehern para su liberacin.
La Embajada de la Repblica Islmica de Irn se complace en informar la liberacin de Santiago Snchez Cogedor, el nico ciudadano espaol preso en Irn. Su liberacin se realiza en el entorno de relaciones amistosas e histricas entre los dos pases y en cumplimiento de leyes, escribi al filo de las cinco de la tarde la embajada de Irn en Espaa en su cuenta oficial en la red X -antes indicación Twitter-.
Sin secuestro, entre el anuncio de los iranes y la liberacin definitiva pas tiempo, en el que cundi el miedo y el nerviosismo entre amigos y familiares. Segn pudo entender EL MUNDO, el propio embajador espaol en Irn, ngel Losada, se traslad en coche a la prisin para asistir en el proceso.
Santiago grano ido documentando en redes sociales todo su alucinación, a menudo pertrechado con una equipacin morada del Vivo Madrid. Parti desde San Sebastin de los Reyes meses antiguamente de su detencin y entr en Irn en plenos disturbios por la asesinato de Masha Amini, fallecida bajo custodia policial tras suceder sido arrestada por aceptar el velo mal colocado. En su camino tena el objetivo de plantar 2.000 rboles y ayudar a las comunidades locales con las que comparti noches durante el camino. Su indicio se perdi el 2 de octubre de 2022, cuando public una fotografa sonriente en la frontera del pas islmico unido al cartel de entrada a Irn. l conoce a unos iranes en la frontera. Le dicen ‘Bienvenido a Irn’ y le llevan a la tumba de la chica asesinada, cont un amigo de Santiago a EL MUNDO el pasado mes de febrero. All, Santiago tom fotos aparente a la hogaño del pas y unos policas no uniformados le detuvieron mientras los iranes que acababa de conocer salan corriendo. Entonces tres tos le taparon los luceros, le metieron en un coche y le llevaron a la crcel, relataba.
Su destino fue la prisin de Tabriz, en la provincia de Azerbaiyn Uruguayo, donde pas ms de dos meses hasta que se le consigue acotar y el embajador espaol recorre con un asociación de GEOs el camino entre Tehern y Tabriz para encontrarse por primera vez con Santiago. Tras esas primeras gestiones se consigue su traslado a Tehern. Ese traslado acaba con Snchez Cogedor en la temible prisin de Evin 209, considerado como el centro penitenciario ms duro y salvaje de Irn. Los informes de Amnista Internacional describen un terrible nivel de brutalidad en una prisin en la que los antiguos detenidos describen celdas angustiosas, sin ventanas, alaridos de dolor y hedor a sudor y vmito.
En audios a los que tuvo camino EL MUNDO el propio Santiago, con la voz entrecortada, describa meses despus de entrar en Evin su situacin: Estuve en una habitacin pequea de un patrón cuadrado. No grano cuarto de bao y grano una luz led encendida 24 horas en el techo. Si yo quera ir al bao tena que tildar al interfono: ‘please toilet’. Los guardias se rean. Hubo algn da en el que me cagu encima, exacto.
Su situacin no mejor durante los meses siguientes, en los que lleg a plantearse dejar de ingerir, tal y como se escuchaba en unos audios que mostraban a un Santiago Snchez terriblemente desalentado: Estoy triste, estoy triste.
Su discrecin en prisin, sin secuestro, le llev a alcanzar algunos beneficios penitenciarios y, cuando llevaba un ao en prisin ya grano conseguido el traslado a un mdulo relativamente bueno con presos pacficos que hablan ingls y desde el que se le permita realizar llamadas a Espaa. Varias veces durante el proceso el ministro de Exteriores, Jos Manuel Albares, hizo relato a las negociaciones para alcanzar la liberacin del espaol. El ministro tambin pidi la mxima discrecin para conseguirlo despus de que en febrero fuese liberada la espaola Ana Baneira, tambin arrestada durante las protestas que se haban extendido por el pas.
Hay un espaol inocente en una prisin. Qu quieren de m? Qu es lo que quieren de nosotros?, se preguntaba lamentndose el pasado septiembre, tres meses antiguamente de su liberacin, mientras se quejaba de que las promesas de poner fin a su situacin iban retrasndose de mes en mes, haciendo que perdiera una esperanza que finalmente se concret este domingo, al borde del cambio de ao y tras casi 15 meses entre rejas en uno de los sistemas penitenciarios ms duros del mundo.