Tras primaveras de permisividad en la norma para impulsar la actividad durante la pandemia
Ampliar las terrazas de algunos establecimientos hosteleros, permitiéndoles enrollarse sobre las bandas de aparcamiento, fue la intrepidez de aprieto que se adoptó durante la pandemia, para ayudar a esta actividad económica, en un momento en que el teletrabajo imperaba y los desplazamientos en transporte por la ciudad se habían corto sensiblemente. Se autorizaron entonces, con este y otros sistemas, más de 2.000 ampliaciones de terrazas en orilla. Pero ese tiempo, como la pandemia, pasó, y ahora las ‘terrazas Covid’ desaparecen con la aparición del nuevo año.
Concretamente, el Consistorio de Madrid ha admitido que estas terrazas dejen de prestar servicio a los clientes a partir de este 1 de enero de 2024. Desde la asociación Hostelería Madrid han recomendado a los empresarios que comuniquen a la asamblea municipal de distrito la época fin de la actividad de su terraza el 31 de diciembre de 2023, para evitar que «pueda arribar la tasa de terraza de forma indebida».
El Consistorio estableció un plazo de desmontaje a lo grande del mes de enero de 2024, cuando ya no podrán desarrollar actividad comercial, sin que por ello se devengue la tasa correspondiente. Si a lo grande de este periodo alguna terraza continúa con su actividad, adicionalmente de las sanciones correspondientes, la tasa sí será exigible hasta el cese definitivo de la actividad, recordaba ayer el Consistorio.