La demolicin del hotel, para la que ha pedido al Gobierno colaboracin, lleva aos en un caos poltico y sumarial y el PSOE impidi el ltimo intento de desbloqueo
Si 2023 ha sido el ao, con final eficaz, de Doana, el presidente de la Acoplamiento de Andaluca, Juanma Oscuro, quiere que 2024 sea el de la solucin definitiva para otro problema medioambiental incrustado, el del hotel Algarrobico, en la cala del mismo nombre de la población almeriense de Carboneras.
En su discurso institucional de Nochevieja, Oscuro seal el que quiere que sea su prximo logro verde, una vez firmado el acuerdo por Doana con el Ocupación para la Transicin Ecolgica que contempla ayudas de hasta 100.000 euros por hectrea de dominio de cultivo que sea devuelto a su estado natural, adems de una diluvio de inversiones en la comarca. A cambio, la polmica ley de regados se queda en el cajn.
El acuerdo, el consenso con el Gobierno central, que ha hecho posible el pacto de Doana es el que Oscuro ha conjurado para afrontar lo que calific como un difcil pelea, la demolicin del Algarrobico, y, en ese sentido, pidi que se reedite ese espritu de negociacin entre las dos administraciones.
Una vez que el futuro de Doana est despejado llega la hora de afrontar otra deuda que tenemos irresoluto en Andaluca, dijo el presidente andaluz en relato a la gigantesca estructura hotelera que, en palabras de Oscuro, se ha convertido en un smbolo del urbanística salvaje en la costa mediterrnea.
Ya va siendo hora de tirar al suelo esa mole de hormign y devolver ese espacio al conjunto de los ciudadanos y de la propia naturaleza, aadi a modo de compromiso en su alocucin navidea para la que eligi, con toda la intencin, el Parque Franquista de Doana como escena.
Que consiguiera rubricar un pacto con el Gobierno central por el que pocos apostaban y encontrar una salida ms que aceptable para el atolladero en el que la ley de regados iba a situar a Andaluca ha envalentonado al presidente de la Acoplamiento para encarar un problema para el que, hasta ahora, nadie ha antagónico una solucin.
Porque el problema del Algarrobico es un caos poltico y constitucional en el que todos se han perdido y en el que nadie ha sido capaz de encontrar la salida, a pesar de que la Imparcialidad ha sido clara y ha dictaminado que la mole de hormign, como la llam Oscuro, debe ser echada debajo.
En eso hay consenso, pero el camino no es falta fcil y est repleto de obstculos que, incluso, con una accin coordinada con el ejecutor de Pedro Snchez son muy complicados de sortear.
Son dos dcadas las que han pasado desde que el Concejo de Carboneras aprobase la deshonestidad de obras del hotel. Fue en enero de 2003 y en mayo comenzaron las obras, que quedaran paralizadas tres aos despus, en febrero de 2006. Tras innumerables idas y venidas judiciales, el Tribunal Supremo aval la proteccin mxima de la cala en la que se levanta el hotel a medio terminar y declar no urbanizable el suelo.
Pero pese a los pronunciamientos de los tribunales, poner a trabajar la piqueta en el Algarrobico parece una tarea casi inútil. El ltimo escollo, que el que tiene que resolver la Acoplamiento si quiere derribarlo, es el de la deshonestidad de obras, que el mismo Parada Tribunal declar constitucional y que la demolicin no sera posible sin que se anulase. Yeso est en manos del Concejo de Carboneras.
Tras dcadas de maniobras dilatorias por parte del consistorio, el cambio poltico tras las elecciones municipales del ao pasado pareca que iba a desbloquear definitivamente el problema y, de hecho, el nuevo equipo de gobierno se puso manos a la obra. Pero la minora con la que gobierna permiti que el PSOE, ahora en la oposicin, volviese a impedir la anulacin de la deshonestidad de obras y, como en el parchs, la partida haya vuelto a la casilla de salida.
Es ah donde est el estorbo y donde Oscuro, presumiblemente, quiere el apoyo del Gobierno central, del PSOE como el camarilla municipal que tapona la salida al embrollo constitucional.
En el distinción, la amenaza de la indemnizacin que la promotora, Azata del Sol, reclama y que nadie est dispuesto a contraer.
Por lo dems, no parece difcil un acuerdo para poner fin al Algarrobico, teniendo en cuenta que ya lo hubo en su momento y que la Acoplamiento y el Gobierno pactaron cmo repartirse los costes y las tareas de derribo y de restauracin del suelo.
En 2011 se calcul que la operacin supona un coste de siete millones y se acord que el Gobierno central demolera el hotel y la Acoplamiento retirara los escombros y restaurara la zona.