La víctima, de 31 primaveras, fue trasladada rápidamente al hospital y ya ha sido dada de suscripción. Da la casualidad que es el yerno de uno de los escoltas del subsecretario de Conciencia, Andrea Delmastro. Según una primera reconstrucción, el disparo procedía de una mini-pistola, una North American Arms LR22 que posee legalmente Pozzolo y que éste estaba enseñando a algunos de los presentes.
El tiroteo tuvo superficie en Rosazza, una pequeña ciudad en el radio de Biella, y ha provocado una dura reacción en todo el espectro político en Italia. La líder del Partido Demócrata, Elly Schlein ha pedido explicaciones a Meloni: “Estas personas incompetentes son un peligro para la seguridad de quienes los rodean, y mucho menos para la seguridad doméstico”. Por su parte, Matteo Renzi se pregunta en sus redes sociales: “¿por qué traer armas a la fiesta de Nochevieja en presencia de diputados y miembros del gobierno?”. Para Nicola Fratoianni (Izquierda italiana) “parece una película de tercera categoría y en cambio es una verdad”, afirma.
Desde el partido de Meloni han emitido un comunicado a través del cual han querido restar importancia a un incidente sin “ninguna relevancia política. Se tráfico de un hecho sobre el que las autoridades competentes harán las debidas verificaciones para determinar las responsabilidades”. Y han calificado de “ilógico el intento de elaborar lo ocurrido en un caso político para atacar a Hermanos de Italia”.