Este hombre recibió una emplazamiento de un número desconocido. En un primer momento tan solo “escuchaba golpes sobre el suelo”, colgó, volvió a seducir y fue entonces cuando una persona longevo le habló: “Ayúdame por confianza, ayúdame. Estoy en el suelo y no me puedo construir. Estoy solo en casa”, narra el ‘Diario de Cádiz’. Inmediatamente, consiguió datos sobre el hombre y rápidamente se puso en contacto con Emergencias, explicó la situación a la operadora y le facilitó los datos de la persona.
Unas horas más tarde, el camionero recibió la emplazamiento de la hija del anciano que le dio las gracias por su ayuda, ya que sin él quizá su padre habría muerto. El hombre había sufrido una embolia en el cerebro y ya había sido atendido por los servicios sanitarios.
Este ‘bendito de la observancia’ es voluntario de Cruz Roja y de Protección Civil de Benalup. Quizá esas ganas de ayudar en esta ocasión han superado todas sus expectativas.