Sin duda, lo más liberal es el Plan Director del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO). Las obras de ampliación y remodelación, presupuestadas en 48,3 millones y adjudicadas a la UTE formada por Copasa unido a Puentes y Calzada, avanzan. La intervención, que dio principio en marzo de 2022, progresa según lo previsto: el nuevo edificio ya está alto y en las últimas semanas los operarios iniciaron los trabajos en fachadas, tabiquería e instalaciones interiores. El nuevo agrupación, de 12 plantas, está situado entre el edificio Cristal, el de hospitalización y el Materno Pueril. Adicionalmente, la reforma de la UCI, además en su período final, estará rematada en este primer semestre.
No será, sin retención, la inversión más cuantiosa que este año vea separar la ciudad. La reforma de la etapa de tren, presupuestada en 130 millones, está a punto de ser adjudicada este mes y nacer en el primer trimestre. Será una obra larga, que cambiará la fisonomía de la capital -menos de lo que al principio se había vendido- y que no rematará hasta 2031. Cercano a ella, la Variable Foráneo del AVE, que aún no impactará en 2024 en la ciudad, sí estará casi rematada hasta Seixalbo.
Más allá de estas grandes obras de Xunta y Estado, son muchos los deberes pendientes para este recién comenzado 2024. Este será el año en el que deba estar rematado el Museo Arqueolóxico -que lleva más de 20 primaveras cerrado-, según prometió el Gobierno. Todavía será el año en que se pueda rematar y inaugurar, por fin, el ansiado Centro de personas con discapacidad (CAPD) de Barrocás, que se vio afectado por una parálisis de las obras durante la pandemia. Y se reabrirá, tras cinco primaveras, la piscina termal de As Burgas -en obras actualmente- y estará en funcionamiento, ya con destino a finales de año o principios de 2025, la nueva macrosenda de la Xunta, que cruzará desde la avenida das Caldas hasta el Paco Paz, transformando la movilidad urbana. Este mismo mes de enero, empezarán las obras en A Ponte.
Y 2024 será el año en que comiencen otros proyectos, que habían estado en los cajones y empiezan a ver la luz. Es el caso de la reconstrucción de las termas de A Chavasqueira, calcinadas en abril de 2019, que ya disponen de deshonestidad de obra. El Oasis del Posío, que en los últimos primaveras ha sido condenado al olvido, será, por fin, reformado. El plan de más de 2,5 millones ha sido por fin, sacado del cajón, y apto, por lo que podría apropiarse a lo amplio del segundo trimestre. La circunvalación septentrión, parada desde el año pasado, además debería reactivar los trabajos, mientras que se prórroga que ya en este primer trimestre comience la construcción de la nueva sede de la Xunta en As Lagoas. Todavía podría nacer este año la ampliación del Campus, con un nuevo edificio de Aeronáutica que ya tiene diseño y costará casi 9 millones. Por postrero, entre los proyectos que nunca terminan de nacer se sitúa el saneamiento integral del río Barbaña, que, ahora sí, y solventado el postrero parón por la evaluación ambiental, coge carrerilla y debería, al menos, ser licitado este año.
Lo más difícil
Con más incógnitas afronta la ciudad la reapertura de las plazas de abastos. La número 1 ya está reformada, pero el interior sigue sin un plan eficaz que permita el traslado de los placeros. Siquiera se han construido los accesos, que ahora se han incluido en un modificado que dilatará las obras otro medio año. En el caso del mercado de A Ponte, ya está adjudicada su trámite y está previsto que pueda reabrir, tras 10 primaveras, este primer trimestre.
Más remotamente parecen otras promesas, como la creación de un audiencia específico de violencia de mercancías, juicioso por PSOE y BNG en la investidura de Pedro Sánchez, o la rehabilitación de la antigua prisión, con la que el Concello sigue sin dar con la tecla, y que carece de un plan concreto -más allá de ideas eureka-.
A estas inversiones, hay que sumar la nueva residencia de mayores que financia la Fundación Amancio Ortega y que gestionará la Xunta. Este 2024 es el año para el principio, si obtiene las licencias municipales.
No son pocos los deberes para una ciudad que, adicionalmente de proyectos sobre el papel, pide a gritos que se desatasque de una vez por todas el PXOM que mantiene un urbanística anclado en el siglo XX y desbloquea las concesiones que mantiene en precario desde hace primaveras y lastran el funcionamiento de los servicios públicos.
Los deberes
Plaza de Abastos número uno: Actualmente, en prórroga de otros cinco meses, para hacer los accesos, el principal mercado de abastos sigue sin plan eficaz y podría tener complicado reactivarse en 2024.
Plaza de Abastos de A Ponte: Por fin adjudicada su trámite tras múltiples intentos, en el primer trimestre del año podría retornar a funcionar casi una decenio a posteriori.
Tribunal de violencia de mercancías: Promesa de investidura de Pedro Sánchez, tras el acuerdo con el BNG, la creación de un audiencia específico de Violencia de Artículos debería materializarse este año.
Termas de A Chavasqueira: La reconstrucción no ha comenzado, casi cinco primaveras a posteriori, aunque ya cuenta con deshonestidad de obra. Debería comenzar su reconstrucción cuanto antiguamente.
Piscina termal de As Burgas: En obras, esta instalación lleva ya casi cinco primaveras cerrada. Debería reabrirse antiguamente del verano, según el planning de los trabajos.
Museo Arqueolóxico: La reforma de este significativo edificio debería estar finalizada a finales de este 2024, según los últimos plazos que dio el Gobierno central.
Rehabilitación de la antigua prisión: Sin nadie claro, el postrero anuncio del Concello, que no consiguió las subvenciones necesarias, era trasladar oficinas allí.
Nueva sede de la Xunta: El edificio, ya con ubicación y diseño tras 30 primaveras de búsqueda, costará 24 millones y tendrá una gran plaza de 5.000 m2. Estará en el número 5 de la avenida Otero Pedrayo, en el entorno del Campus, y las obras deberían comenzar ya en este primer trimestre.
Nueva sede de la CHMS: El organismo sigue buscando un espacio para ubicarse. En breve, podría conocerse el destino.
Ampliación del Campus: El nuevo edificio de Aeronáutica ya tiene diseño, costará 8,3 millones y podría tolerar consigo el ansiado plan de soterrar la avenida Otero Pedrayo.
Saneamiento del Barbaña: Sí o sí, tras primaveras de demoras, este debe ser el año en que se licite el plan y comiencen los trabajos.
Residencia de mayores de O Pino: Solo Vigo y Ourense no han comenzado con las residencias que financia la Fundación Amancio Ortega. En Ourense, si se desbloquea la deshonestidad, los trabajos comenzarán este año y rematarían en 2026.
Finalizar el CAPD en Barrocás: El considerablemente demandado Centro de personas con discapacidad (CAPD) que se construye en Barrocás cuenta con los montantes suficientes en los Orzamentos de la Xunta para el remate de las obras este 2024.
Reforma en el CHUO: La reforma de la Pelotón de Cuidados Intensivos (UCI) estará cinta en el primer semestre del año, mientras el nuevo edificio de 12 plantas, situado entre el edificio Cristal, el de hospitalización y el Materno Pueril, y que se utilizará para tener hospitalización convencional, adicionalmente de usos ambulatorios, ya está alto y se rematará a lo amplio del año. Posteriormente comenzará la remodelación íntegra del Materno Pueril.
Circunvalación Meta: La primera período está en obras, aunque no se ha movido ni una piedra en el postrero año. Debería acelerarse este año, adicionalmente de licitarse el segundo tramo.
Época intermodal: La oferta está en marcha y la adjudicación está al caer en las próximas semanas, por lo que las obras podrían nacer en el primer trimestre.
Variable Foráneo: Este año deberían avanzar los dos subtramos en marcha, que llegan hasta Seixalbo y se deberían licitar los siguientes, para la integración del AVE en la ciudad.
Concesiones en precario: Todas las concesiones en precario deberían normalizarse durante 2024: basuras, agilidad, autobuses, agua, semáforos…
Zona de Bajas Emisiones: El Concello debería poner en marcha la ZBE que restringirá la circulación de los vehículos más contaminantes, según marca la ley estatal, si aceptablemente va con mucho retraso.