Los técnicos de Hacienda resaltan que este sorteo distribuirá un total de 770 millones de euros en premios, lo que representa un aumento de 70 millones en comparación con el sorteo del año pasado. Como en ediciones anteriores, solo los dos primeros premios de 200.000 y 75.000 euros por décimo tributarán con un 20% sobre la parte que exceda los 40.000 euros, garantizando que los agraciados con el tercer premio reciban los 25.000 euros limpios.
Gestha advierte que aquellos afortunados que compartan un décimo campeón de más de 40.000 euros deberán abonar a Hacienda la proporción correspondiente a su décimo, incluso si esta es último a esa emblema. Esto se debe a que el impuesto se aplica sobre la cantidad del premio que supere los 40.000 euros por décimo, independientemente de la porción del premio recibida por cada participante.
Adicionalmente, alerta a los ganadores que hayan adquirido un seguro de reintegro de impuestos de la quiniela que la indemnización equivalente al impuesto retenido tributa como un aumento de patrimonio a incluir en la revelación de la renta correspondiente a 2024.
Gestha pide que se graven los premios a partir de 2.500 euros
Los técnicos de Hacienda sostienen que el fisco podría reunir 10.725.000 euros adicionales en la Rifa del Chiquillo si los montantes se gravaran a partir del exiguo exento de 2.500 euros, válido entre 2013 y el 4 de julio de 2018.
En este sentido, argumentan que carece de sentido no fertilizar a Hacienda por una rendimiento de 40.000 euros en un ocio de suerte y sí por una prestación por desempleo o una subvención de 1.000 euros. Por lo tanto, instan al Gobierno a restablecer el exiguo exento de los premios de Loterías estatales y autonómicas, ONCE y Cruz Roja a los 2.500 euros iniciales.
Asimismo, Gestha señala que los premios no afectan al IRPF de los ganadores, quienes sólo deben fallar los rendimientos generados con el mosca obtenido, como por ejemplo los intereses bancarios. De la misma forma, los premios siquiera inciden en la solicitud de becas, prestaciones o ayudas públicas basadas en ingresos, ya que el mosca rematado no se introduce en la cojín del IRPF. Sin requisa, las sociedades deben registrar el valor completo del premio como ingreso extraordinario y deducir la retención del impuesto de loterías.
Los “premios sospechosos” de los sorteos de Navidad
Gestha celebra que la ley de prevención del fraude de julio de 2021 haya instaurado la obligación de la Sociedad Estatal Loterías y Apuestas del Estado (SELAE) y la ONCE de avisar mensualmente a la AEAT del mosca repartido, pero advierte sobre los premios obtenidos por entidades como sociedades, fundaciones y asociaciones, que llegaron en 2022 a los 153,7 millones de euros. Por ello, instan a cambiar la ley para evitar que estas entidades en pérdidas o parcialmente exentas reciban la devolución de la retención del impuesto del 20%.
Por final, los técnicos de Hacienda solicitan que les den permiso para comenzar las investigaciones tributarias y por jalbegue de capitales de los 686,8 millones otorgados a las entidades jurídicas por premios de más de 40.000 euros entre 2019 y 2022, no prescritos.
A pesar de las propuestas de ampliar las exenciones, Gestha sugiere que para combatir el fraude fiscal, sería más efectivo incrementar las competencias y responsabilidades de los técnicos de Hacienda para optimizar el control y la cuestación.