Café informal con divergencias
Sirera relató el disputa sostenido con Albert Batet, presidente de Junts en el Parlament de Cataluña, y Josep Rius, portavoz de la formación independentista en el consistorio barcelonés. El propósito del disputa, según el dirigente popular, fue conocer las demandas que pudiesen influir en el apoyo de Junts a la investidura de Feijóo. No obstante, Sirera afirmó que las exigencias presentadas eran similares a las expuestas por Carles Puigdemont al PSOE: un referéndum y indulto.
Sirera aseveró en varios medios que no se entabló negociación alguna durante la reunión, sino que su rol se limitó a escuchar las demandas, las cuales consideró “totalmente incompatibles con cualquier proceso de diálogo“. Adicionalmente, subrayó que tras ese disputa, no se reanudó el contacto con Junts en ningún nivel.
Construcción táctico de Feijóo
Alberto Núñez Feijóo previamente había admitido contactos “indirectos” con representantes de Carles Puigdemont para apañarse organizar la relación con el independentismo. Sin requisa, la presión tanto interna como externa obligó al líder del PP a dar marcha antes en sus intenciones de reunirse formalmente con representantes de Junts en el Congreso.
El rechazo a la reunión formal estuvo motivado, según sectores internos del partido, por los riesgos políticos de una imagen pública con la formación independentista. Feijóo justificó su cambio de postura argumentando las condiciones públicas presentadas por el expresidente catalán, quien condicionó su apoyo a una ley de indulto y avances con destino a la autodeterminación.
Opacidad y demandas
La opacidad en torno a estos encuentros ha generado reacciones en el ámbito político. El PSOE ha necesario al PP transparencia sobre la frecuencia y temas tratados en los encuentros con Junts, solicitando una dilucidación pública de dichas reuniones. Desde el Gobierno, se ha interpelado al Partido Popular para clarificar sus relaciones con Junts tras las elecciones generales, planteando la posibilidad de utilizar este tema como parte de la campaña para las elecciones gallegas próximas.
Este inesperado disputa entre el PP y Junts, aunque desestimado como una mera acercamiento de posturas, ha generado un inusitado revuelo político. La revelación de estos contactos informales deja abiertas incógnitas sobre las relaciones entre partidos con posturas opuestas, lo que podría influir en el proscenio político a futuro.