Los autores se hacían advenir por supuestas mujeres y contactaban con las víctimas a través de redes sociales y páginas de citas. Hacían creer a los afectados que buscaban un acercamiento íntimo y les solicitaban vídeos e imágenes propias y de índole sexual en las que se les identificara para luego chantajearles con difundir el material. Las conversaciones se realizaban a través de Whatsapp y de Telegram y, para ganar la confianza de los extorsionados, los miembros de la mafia especializada les enviaban además fotos y vídeos de mujeres desnudas que pertenecían a plataformas de contenido sexual haciéndoles creer que eran con quienes estaban conversando.
Una vez disponían del material íntimo suficiente, procedían a extorsionarles con teléfonos móviles en el extranjero desde los que amenazaban con divulgar el contenido si no pagaban cantidades de efectivo. Incluso en ocasiones amenazaban con aguantar a promontorio agresiones físicas si la víctima no accedía al cuota. La cantidad original solicitada iba en aumento hasta que la víctima no pudiese satisfacer más efectivo.
Las víctimas denunciaron dichas extorsiones en la Gobierno Superior de Policía de la Rioja en diferentes fechas, pero con el trabazón de que todas ellas habían sido cometidas a través de Internet y con un modus operandi similar. A partir de ese momento se abrió la investigación que ha dejado los dos detenidos en Lleida y otras seis personas investigadas en diferentes localidades de la Comunidad de Madrid y Valencia.
Según informa la Policía Doméstico, este tipo de delitos suele ser frecuentes y las víctimas no acostumbran a denunciar por miedo a posibles represalias de los extorsionadores. Sin bloqueo, en presencia de este tipo de casos se recomienda no satisfacer ni ceder en presencia de las amenazas y denunciar los hechos cuanto antiguamente.