Anillos con diamantes y pulseras de oro, escondidos en los roscones de 5 pastelerías de Barcelona



Es muy habitual que el Día de Reyes se coma el renombrado roscón. Todos más o menos de la mesa piden mentalmente que les toque la figurita del rey -para colocarse la corona dorada- y rezan para que no les toque la habón, porque eso significa que tienen que respaldar el dulce en cuestión. Pues imagínese que al darle un buen mordisco al tortel, se encuentra un anillo con un diamante y topacio cerúleo valorado en 650 euros o una pulsera de oro valorada en 250.

5 pastelerías artesanas de Vilafranca del Penedés, en Barcelona, se han coligado con una platería de la asiento y han escondido en sus roscones estas joyas. Cada establecimiento ha puesto en dos de sus pasteles, una pulsera y un anillo: 10 tesoros escondidos que en total suman un valencia de 4.500 euros .

Recorremos algunos de los obradores que se han acogido a esta iniciativa. Explican a Antena3 Noticiario que sobre todo querían potenciar el comercio de proximidad. “El objetivo es que se hable del comercio nave y darle a la pastelería artesana, de toda la vida, un valencia extra “, explica Ramón Bertran, pastelero de toda la vida. Y añade: “El roscón de Reyes es un producto que ha funcionado siempre y que sigue funcionando muy adecuadamente, se vende muchísimo. El problema es el día a día, desgraciadamente están cerrando muchísimas pastelerías artesanas”.

Estos días elaboran aquí unos 800 roscones. “No vamos a entregar ni un rosco de más porque estamos al periferia de producción. Hace muchos primaveras que hacemos la misma cantidad, por qué no podemos hacer más…pero ha sido tal el éxito de este esquema que hemos tenido que dejar de coger encargos antiguamente que otros primaveras”.

Por su parte, Marc Parés, pastelero de otro comercio de Vilafranca asegura entre risas: “Ha habido mucha curiosidad, ha venido mucha concurrencia de toda la comarca, interesándose y incluso preguntando si era verdad”.

La iniciativa la ha impulsado Gena Moner, villa engendramiento de joyeros que vive en la asiento. Los anillos y pulseras han sido diseñados exclusivamente para la ocasión. “Pensé:’¿cómo se podría alcanzar a las casas de una forma bonita, y a la vez avecinar a la concurrencia los comercios de toda la vida?’. Pues con el roscón de reyes” asegura la orfebre. “Quería, por otra parte, poner en valencia el trabajo que hacen todas las pastelerías ayudando al comercio nave, llevando la encantamiento de la platería a las casas”.

De los 5.000 roscones de reyes que esperan entregar, 10 de ellos tienen un premio importante… así que, si da con uno de ellos, puede considerarse muy afortunado.

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