Nacho Mugüerza, el propietario del establecimiento situado en la Avenida de la Habana de la renta ourensana, aún lo recuerda perfectamente. “Vendimos 10 décimos, por un cuantía total en premios de 194 millones de pesetas“, arranca el lotero.
“Regalo que el premio recayó en la plantilla de camareros del Hotel Sila (coetáneo Princess), y que los agraciados optaron por dejar de trabajar en ese establecimiento”. No obstante, aclara que “siguieron trabajando, simplemente cada uno emprendió a su forma e hizo con el mosca lo que le pareció adecuado. Entonces ese premio era un gran renta“.
La mañana del Sorteo se quedaron sin radiodifusión
Mugüerza recuerda otras anécdotas de aquel Primer Premio de la Suerte del Criatura, pero ninguna como la de la propia mañana en que se enteraron de que habían repartido el premio.
“Entonces la Suerte se seguía por la radiodifusión y, correcto a un percance, nuestro artilugio se cayó ese mismo día, por lo que nos habíamos quedado sin informativo del Sorteo. Hasta que un conocido entró y nos comunicó que habíamos vendido el Primer Premio“, prosigue el lotero, que recuerda todos los detalles con gran precisión.
Pocos días para traicionar Suerte del Criatura
Por extremo, Nacho Mugüerza no ve grandes diferencias con la traspaso de décimos para la Suerte del Criatura respecto a otros abriles. “En todo caso está poco parada por el hecho de que hay pocos días de traspaso entre el (Sorteo) del Gordura de Navidad y la Suerte del Criatura. Adicionalmente ha hecho frío, ha llovido, el lunes fue festivo… todo influye“, concluye.