En tiempos del bipartidismo PSOE y BNG -concretamente, en 2008-, la Xunta anunció la licitación para el estudio informativo y ambiental de un acceso a la N-120. El ramal serviría para comunicar Caldelas y Trives con Valdeorras, pero también con la futura autovía. El presupuesto inicial rozaba los 240.000 euros. El entonces presidente del Ejecutivo regional, Emilio Pérez Touriño, aseguró en un acto oficial de ese año que se iba a construir el acceso, que su longitud sería de siete kilómetros y que su coste sería de 26 millones de euros. El estudio informativo llegó a ser premiado por 174.600 euros.
Más allá de esas promesas y esa adjudicación, no se supo nada más, a pesar del viaje decimonónico del OU-636. Entre A Pobra de Trives y Hay 12 kilómetros hasta Rúa en línea recta.. Sin embargo, se tarda más de media hora en recorrer los 27 kilómetros que separan ambas localidades. El viaje a la capital no resulta mucho más placentero, teniendo en cuenta el mal estado de algunos puntos de la OU-536 entre Trives y Ourense. La situación condena al aislamiento a la región en la que se encuentra la única estación de montaña de Galicia, Manzaneda.