Suárez, unido a los números uno del Congreso, Garbo Ibáñez y Senado, Javier Lacalle; la procuradora Inmaculada Ranedo, y la portavoz en el Consistorio de Burgos, Andrea Ballesteros, han comparecido este martes para presentar los objetivos del nuevo año de la formación política para la provincia de Burgos.
En este sentido, ha recordado que este acuerdo váter, que ya estaba sección irresoluto de su firma, se paró correcto a que «hay una convocatoria de elecciones en Castilla y Arrojado, se conforma un Gobierno en coalición con Vox y, a partir de ahí, es una barrera, es un periferia que el Gobierno vasco entiende que no va a producirse, que es impresionar a ningún tipo de convenio con una delegación en la que esté representada un categoría Vox».
Poco que al PP, dijo, le parece «una excusa», que lo que hace, ha colaborador, «es alejarnos del principal objetivo, que es prestar la mejor sanidad, que es hacerlo de forma colaborativa como ya se está haciendo en otras zonas y que es hacerlo por otra parte al ganancia de, en este caso, cuál ha sido la voluntad a la hora de elegir por parte de una Comunidad como es Castilla y Arrojado».
Por ello, Suárez ha confiado, en declaraciones recogidas por Ical, en que «se desatasque» y se pueda «formalizar» ese convenio. «Esperemos que se quiten este tipo de excusas y que de una vez por todas tengamos un convenio en el que se beneficia tanto el castellano y leonés, el burgalés en este caso, como el vasco, en esa relación de entender que hay que ponerse de acuerdo en cuestiones tan lógicas y tan sensibles como son las sanitarias con independencia de donde resida en este caso el vecino que recibe esa atención», ha insistido.