Bajo el lema “No es como lo pintan”, decenas de personas se concentraron este miércoles en Toledo para denunciar la “deriva militarista” de la Unión Europea, coincidiendo con la cumbre de ministros en la Ciudad de las Tres Culturas. Convocada por Ecologistas en Acción, la reunión se celebró en la Plaza de Zocodover, donde se exhibieron pancartas y carteles.
Según los manifestantes, esta “deriva militarista” se refleja en el aumento del gasto militar de los países miembros, entre ellos España, que “incrementará el gasto militar hasta un 2% de su PIB en los próximos años”. Afirman también que las reuniones de ministros europeos de Asuntos Exteriores y de Defensa coinciden con el Foro sobre la Industria de Defensa, en lo que “parece ser un impulso a esta como estrategia de seguridad”. “No se entiende que apuesten por la venta de armas y el endurecimiento de fronteras en lugar de la concordia, la negociación y el entendimiento que se suponía que era el espíritu de la Unión Europea”, añaden en un comunicado.
Este movimiento, afirman, coincide con la actual política exterior europea, que “se basan en el envío de armas y tropas a zonas de conflicto, como el recientemente aprobado para Ucrania bajo la denominación ‘Fondo Europeo para la Paz’ de 20.000 millones y el trato más duro a los inmigrantes y la militarización de nuestras fronteras. Según los organizadores, los países de tránsito pueden, “cuando no contratan”, “maltratar a las personas que intentan llegar a Europa, infringiendo las leyes internacionales y las nuestras”.
Sostienen que “al mismo tiempo se extraen enormes cantidades de recursos de los países de origen de estas personas, lo que es una de las causas de la pobreza, la esclavitud, la pérdida de calidad de vida, si no la pérdida de vidas” o ” la aparición de movimientos armados radicales», que “Hacer que la gente migre a nuestro continente”.
Los manifestantes entienden que una política de seguridad y defensa exterior eficaz “es el compromiso inequívoco con la diplomacia y la negociación”. “Trabajar junto a países en conflicto o con una fuerte emigración para que su población tenga una vida digna, y que dentro de la Unión Europea se fomenten la salud, la vivienda y las cuestiones que realmente influyen en la seguridad y la felicidad de las personas”, aseveran.