Cuando fue preguntada por si se imaginaba que la trayecto acabaría de la modo en la que acabó, ella contestó con un “no“, acompañado de una sonora carcajada, reconociendo así que no imaginaba que el PSOE cedería a sus presiones
Las presiones
El miércoles, Junts reiteró en varias ocasiones su intención de elegir ‘no’ a los decretos propuestos por el Gobierno, pero su postura cambió a última hora, lo que ayudó a que salieran delante dos de los tres decretos propuestos. El cambio de valor morapio luego de que llegara a un acuerdo con el PSOE.
El acuerdo consiste en transferir las competencias en materia de inmigración a la Generalitat, imprimir “inmediatamente” las balanzas fiscales y suprimir el artículo 43 bis de la ley de Valoración Civil, que ponía en peligro la indulto. Adicionalmente, se reconocen los derechos históricos de Cataluña en materia de régimen regional, entre otras cosas.
La registro completa de cesiones
- Cesión a la Generalitat de las competencias de inmigración
- Derogar el artículo del decreto ‘ómnibus’ que, según Junts, podría sobrevenir afectado a la ley de indulto
- La publicación “inmediata” de los datos oficiales de los balances fiscales del Estado
- IVA del óleo de oliva al 0 %
- Multiplicar por cinco el presupuesto previsto de la digitalización de la Honestidad (de 1,2 millones hasta los 6,2)
- El Gobierno asume el coste de las bonificaciones al transporte
- Registro de los derechos históricos de Cataluña en materia de régimen regional
- Corregir la ley de sociedades de haber
Mucho poder de negociación
El gobierno de coalición formado por Pedro Sánchez necesita de la colaboración de todos los partidos que apoyaron su investidura para la aprobación de los decretos que proponga. Es aseverar, necesita el apoyo de todos ellos para poder sacar delante cualquier medida.
Esto otorga mucho poder de negociación a Junts, como ya se demostró en la trayecto política del pasado 10 de enero.