Ante la “incertidumbre” que generan los resultados electorales del pasado 23 de julio, el presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, ha querido resaltar este miércoles “la tan necesaria “estabilidad política” que “ofrece” la coalición formada por PP y Vox en la Comunidad, clave, a su juicio, para poder “impulsar el futuro de nuestra tierra y de las personas que aquí viven”. En su primer acto público tras el ‘parón’ festivo, el líder del Ejecutivo autonómico ha insistido en la idea de que su Gobierno desarrolla medidas “útiles y eficaces”, que es lo que “nos exigen los ciudadanos” para concluir que “están cumpliendo los objetivos que se marcaron” al inicio de la legislatura y que, a su juicio, se traducen en crecimiento económico y empleo y en tener “una valoración de los servicios públicos entre los mejores de España”.
En su discurso en los jardines de la sede de la Junta también ha llegado a silenciar -queriéndolo o no- el insinuaciones lanzadas por los socialistas sobre un nuevo adelanto electoral. Sin responder directamente a esta pregunta, Fernández Mañueco ha desestimado al principal partido de la oposición afirmando que “cada uno pierde el tiempo como quiere, pero yo estoy con el pueblo de Castilla y León”.
Otro de los temas que estuvo en el candelero y que también se ha cerrado de alguna manera fue su anuncio de que en la segunda quincena de septiembre pedirá a las Cortes la convocatoria al Debate de Política General de la Comunidad, cuyo retraso había servido de munición a los distintos grupos políticos en las últimas semanas. Tras resaltar que no se pudo realizar en junio al encontrarse en pleno período electoral entre las elecciones municipales y generales, consideró que ahora es el momento adecuado para proponerlo. Será el propio Parlamento regional el que fije una fecha definitiva que, si no hay nuevas sorpresas -ligadas a la gobernabilidad en España-, tendría que ser durante el mes de octubre. De momento, el calendario de plenos fijado incluye las sesiones para los días 3 y 4 y 17 y 18 de este mes, pero la Cámara puede trasladar cualquiera de estas fechas para su celebración.
Encuentro con los grupos
Ya ha adelantado en este sentido que en ese debate afirmará que es “necesario” que se dé “un impulso” en Castilla y León tras “cuarenta años de autonomía demostrando nuestro peso y liderazgo”. Además, ha citado el apoyo a las familias, la modernización de la Comunidad, el avance de los servicios, la creación de oportunidades y la cohesión como algunos de los temas a los que se referirá.
Fernández Mañueco también ha desvelado que una vez se produzca esta reunión se reunirá con todos los grupos políticos para “analizar la situación política” en Castilla y León.
A nivel nacional, además de garantizar que “seguiremos contribuyendo con lealtad y solidaridad al futuro de España” con “un papel fundamental”, también ha asegurado que “Vamos a ser exigentes en la defensa de los intereses de la Comunidad”lo que concretó en un modelo de financiación “con criterios objetivos y de trato equitativo en el que se defienda la igualdad de todas las personas en todo el país”.
Más claro aún fue al afirmar que este país “necesita” un Gobierno “presidido” por Alberto Núñez Feijóo porque “daría estabilidad, apostaría por la generación de oportunidades y por la igualdad y tendría una visión muy cercana a Castilla y León.” En este punto, se ha referido a la reunión celebrada ese mismo día entre el presidente de los populares y el líder del PSOE, Pedro Sánchez, de quien ha lamentado que “lamentablemente está más cómodo en el acuerdo de traspaso y aceptando chantajes con los separatistas que en poder reunirse con el PP”. Posteriormente, ha mostrado “con todo” su apoyo a la propuesta del candidato del PP a la Presidencia y que se traduce en dos años de legislatura para cumplir con seis pactos de Estado (institucional, de bienestar, de saneamiento económico, de las familias, de agua y territorial). y luego celebrar elecciones generales.
Preguntado por su valoración de una improbable negociación entre PP y Junts, Manueco ha recordado que “el mandato” recibido del Rey obliga diálogo con todas las fuerzas políticas, excepto con Bildu “por razones obvias” además de que con los resultados del 23 de julio los ciudadanos han pedido “diálogo” a los partidos, aunque han reconocido que pueden estar en “las antípodas” de lo que otros partidos defienden en lo que dice la Constitución. En cualquier caso, fue contundente al señalar que los populares no cederán “al chantaje ni a las reclamaciones” porque “nuestras líneas rojas son claras y son los principios del PP”.