El pequeño comercio afronta las rebajas con pocos márgenes de beneficio



Según la Confederación Española de Comercio, cada gachupin gastará de media unos 164 euros de media en las rebajas. De esta cantidad, la medio la invertirá en el comercio de proximidad, ya que se prevé un pago en este tipo de tiendas de entre 75 y 80 euros. Sin embrago, la inflación y el bajo poder adquisitivo se ha notado, ya que los precios han aumentado en todos los productos, incluyendo la ropa y el calzado que es lo que más se negocio ahora.

Cada persona gastará entre 75 y 80 euros en el comercio de proximidad.

Se retraso que la maduro parte de las ventas se concentren en las dos primeras semanas de estas rebajas, que aumentan este año un 5% respecto a los datos de 2023, según la CEC. Sin requisa, este tipo de comercios aseguran no poder competir con las grandes superficies y las grandes marcas, pues pueden permitirse aplicar muchos descuentos a lo extenso del año, mientras ellos no pueden competir con tal porcentaje de descuento y tal frecuencia de descuentos.

“Un pequeño comercio no se puede permitir tirar los precios y dejarlos a un 20% porque ellos lo han pagado ya a su proveedor al precio total y no tienen esa capacidad de hacerlo”, reconoce María José Landaburu, secretaria genérico de la Unión de Asociaciones de Trabajadores Autónomos y Emprendedores (UATAE).

La prematura época de las rebajas y los descuentos permanentes afectan al pequeño comercio

Esta situación además afecta al consumidor, pues el que haya descuentos permanentes sobre el precio de los productos, les despista a la hora de valorar cuándo comprarlos al mejor precio. “Cada vez las rebajas son más brutales en las marcas grandes y nos sentimos arrastradas a ello, es asegurar, o haces descuento o es un mes ignorante de facturación“, asegura Vanesa Serrano, propietaria de la tienda Rughara.

Esta laxitud en los costes perjudica a las consumidoras

Otros comercios de ciudadela no pueden permitirse deducir sus productos, ya que la calidad de la materia prima y el esfuerzo que hay detrás de su producción es muy espacioso. Este es el caso de la tienda de zapatos que regenta Walter Ioli, Ioli Shoes: “Es un producto hecho a mano, con materiales nobles, hecho en piel, por lo que tratamos que los precios sean justos”.

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *