Detienen al presunto responsable del incendio de Los Guajáres, en Granada



La Guardia Civil ha llevado a cabo la detención del presunto responsable del incendio forestal de Los Guájares, en Granada, declarado en septiembre del año pasado. El presunto autor es un hombre de 62 años quien había trabajado como bombero forestal y se encontraba realizando labores de prevención cuando se inició el incendio.

El incendio forestal se inició en la zona mejor conocida como Barranco Girón el 8 de septiembre de 2022. El evento afectó un área de 5.194 hectáreas en los municipios de Los Guájares, Albuñuelas, El Pinar, El Valle y Vélez de Benaudalla, permaneciendo activo durante 27 días, hasta que lograron extinguirlo el pasado 5 de octubre.

La investigación del ‘Oasis perdido’

Así ha sido el nombre que ha dado al operativo el equipo de Policía Judicial Ambiental del Seprona: ‘oasis perdido‘. Un año después, han conseguido dar con el presunto autor del incendio. Durante la investigación han colaborado numerosos miembros de la Unidad Central Operativa de Medio Ambiente de la Jefatura de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil, que han incorporado un análisis forense mediante medios técnicos habituales en investigaciones complejas como homicidio o crimen organizado.

También estuvo presente la Brigada de Investigación de Incendios Forestales del Cuerpo de Agentes Ambientales de la Junta de Andalucía que, junto con el equipo de investigadores de la Benemérita, colaboró ​​en la identificación y localización del punto de inicio del siniestro.

Para continuar con la investigación, se realizaron varios análisis de numerosos informes técnicos, reconstruccionesen el sitio‘, análisis de las evidencias físicas dejadas por las llamas para identificar el punto de partida, así como el uso de técnicas de investigación para delitos complejos. Los agentes han logrado localizar al detenido”inequívocamente“en el lugar y hora del inicio del incendio”,descartando la participación de terceros“.

Un incendio que provocó el confinamiento y evacuación de los vecinos

El incendio del año pasado, por su magnitud y peligrosidad, obligó a la evacuación de personas en cortijos y casas aisladas de la zona, obligando a confinar a varios habitantes de las pedanías de Acebuche e Izbor.

El evento alcanzó un frente de 60 kilómetros y devastaron zonas cultivables, pinares y matorral mediterráneo, provocando grandes y graves daños erosivos al bosque y la destrucción de los recursos naturales afectados.

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