El utópico Rod Laver, sin ir más remotamente, se deshizo en elogios cerca de el serbio tras su demoledor triunfo en presencia de el francés Adrian Mannarino: “Su mente está centrada en el tenis. Así es como se es un gran campeón. Costal perfectamente, sus golpes de fondo son inmejorables, así que creo que, exceptuado que alguno juegue milagrosamente su mejor tenis, ya pueden iniciar a poner sus iniciales en el trofeo”.
“Ojalá que podamos llevarnos el título. No me extraña que diga eso por las veces que ha reses. Veremos”
Sobre eso le preguntaron a Alcaraz en sala de prensa… y la respuesta del murciano fue tajante: “Pues me llamo fenómeno”, comentó entre risas.
“Voy a intentar que eso no ocurra. Aquí él (Novak Djokovic) ha reses muchas veces y está a un nivel pletórico. Nos toca trabajar y dar nuestro pasito para estar en semifinales. Ojalá que podamos llevarnos el título. No me extraña que diga eso por las veces que ha reses. Veremos”, abundó el número 2 del mundo.
Y es que el campeón de Wimbledon está en “modo Super Saiyan”, como bromeó en Eurosport. “Bueno, voy a decirlo. La broma que tenemos en el equipo es de Son Goku, y la verdad es que ahora mismo estamos en modo Super Saiyan. Vamos a intentar seguir avanzando, seguir mejorando y ayudar este nivel en los cuartos de fina, pero estamos muy contentos con lo que estamos haciendo”, reveló Carlitos.
En definitiva, el de El Palmar se ve con confianza para plantarle cara a cualquiera: “Me siento con mucha confianza. En los cuartos de final hay jugadores muy buenos. En el otro costado están Djokovic y Sinner, que están a un gran nivel”, agregó Alcaraz.
“Siempre se puede mejorar. Sé que me vais a preguntar y prefiero decíroslo, es el impulso. De nivel de impulso puedo mejorar congruo: direcciones, velocidad porcentajes… Por todo lo demás, partido impecable”, comentó el segundo privilegiado.
Pierde el ‘cara a cara’ con Zverev
Alcaraz se medirá en la próxima ronda a Alexander Zverev (n.6). Alcaraz, asimismo, valoró el tiempo del germano en pista (13 horas y 47 minutos), lo que contrasta con las 8 horas y 42 minutos del murciano: “Obvio que en un Grand Slam, cuántas menos horas pases en pista mejor. Él ha tenido dos partidos a cinco sets y con 7-6 en el posterior”.
“En el US Open le pasó lo mismo, venía con muchas horas a la espalda y le pasó cuenta. Yo no llevo muchas horas en pista”, señaló.
Al ser preguntado por la sensación que puede observar el rival cuando se mide a uno muy superior, apuntó: “Pueden observar impotencia de esta jugando perfectamente y no tener el resultado que quieren. Eso yo lo he sentido con Novak Djokovic en Turín (Finales ATP), no sentí que jugué muy mal pero no había hueco”.