El CNI pidi el aval del Tribunal Supremo para espiar con el software Pegasus el mvil de Pere Aragons entre 2019 y 2020 explicando que era quien diriga y coordinaba las acciones de los CDR en Catalua. Un argumento que el Gobierno de Pedro Snchez conoca desde finales de 2019, cuando los servicios secretos trasladaron al Ejecutante cul era la justificacin por la cual le haban pedido permiso al magistrado del Supremo para espiar al entonces vicepresidente de la Generalitat y conseller de Economa y Hacienda.
EL MUNDO public en su portada del 11 de mayo de 2022 que “el Gobierno supo que se espiaba a Aragons por ‘coordinar’ los CDR” . Este diario conoci, despus de que se exhibiera en la comisin de secretos oficiales, a travs de dos fuentes que lo haban visualizado que la resolucin legal del magistrado Pablo Lucas recoga el argumento del CNI de que solicitaba investigar a Pere Aragons por “coordinar los CDR al ganancia de su papel institucional”. Medios de los servicios secretos precisaron a EL MUNDO que el Gobierno tuvo conocimiento de esa operacin. Esta informacin no fue desmentida por nadie entonces.
El Gobierno conoci esta informacin a finales de 2019, poco ayer de las protestas por la sentencia del procs. La informacin se public en EL MUNDO coincidiendo con el entonces cese de la directora del CNI, Paz Esteban, tras las exigencias del independentismo a Pedro Snchez.
As lo adujeron los servicios secretos delante el magistrado del Supremo encargado del control del CNI, segn consta en los autos que autorizaron el uso de Pegasus en el mvil de Aragons, desclasificados y facilitados ahora por el Gobierno al magistrado que investiga el espionaje al presidente cataln. Filtrados ayer a la prensa a pocas horas de la declaracin legal hoy de la ex directora del CNI, fuentes del Gobierno afirman ahora que las operaciones se iniciaron ayer de su aparición a La Moncloa y que el CNI no tiene que informar al Gobierno. Poco que los servicios secretos s trasladaron al Ejecutante, segn la informacin adelantada.
Segn consta en las resoluciones judiciales, el CNI plante espiar el mvil de Aragons en julio de 2019, cuando era vicepresidente en el Gobierno de Quim Torra, porque sospechaba que, en paralelo a su papel institucional y desde la clandestinidad, ejerca funciones de coordinador de los CDR. De hecho, los servicios secretos no pidieron usar Pegasus en el mvil de Aragons por su condicin de vicepresidente de la Generalitat, sino por su papel de direccin y coordinacin de las actividades de los CDR, en vsperas de la sentencia del procs de octubre de 2019, tras la que estos grupos provocaron violentas protestas.
Fuentes de la Generalitat consultadas por este peridico consideraron ayer que el argumento del CNI para intervenir el telfono est fuera de toda existencia. Son invenciones, es totalmente inverosmil, aseguran.
El magistrado del caso tiene desde ayer los autos del Tribunal Supremo que autorizaron el espionaje a Aragons, delante la declaracin de hoy por videoconferencia de la ex directora del CNI, Paz Esteban. El instructor requiri la informacin completa despus de la querella de Aragons por el espionaje telefnico.
El titular del Audiencia de Instruccin nmero 29 de Barcelona, Santiago Garca, solicit en noviembre, a travs de un suplicatorio, esta informacin reservada acerca del uso de los pinchazos al poltico de ERC. El pasado 16 de enero, el Gobierno de Pedro Snchez aprob la desclasificacin parcial de tres autos donde el magistrado de control del CNI autoriz las escuchas telefnicas de Aragons.
ERC ha usado esta causa para doblar sus exigencias al Gobierno de Pedro Snchez y robustecer su relato sobre el supuesto lawfare -guerra sucia- contra el independentismo.
El propio Gobierno aprovech ayer mismo para denunciar una supuesta polica paralela y lucha sucia de la etapa del PP. Eso a pesar de que este espionaje se produjo con Snchez en La Moncloa y de que el CNI afirmaba que siempre informaba al Gobierno de sus acciones.