Este delirio educativo es parte del novedoso software Edumob de la Consellería de Educación, que ha llevado a las jóvenes trivesas a sumergirse en un intercambio individual entre centros de Galicia y Francia. El instituto trivés, motivado por su compromiso con la internacionalización y el mejora de competencias lingüísticas, participó activamente en este software, alentando a estudiantes de primero de bachillerato a presentar su candidatura.
“O software é a primeira vez que o fan e había que presentar unha morea de papeis”, explica Paula, que añade que era necesario tener cursados 4 abriles de francés, con un 8,5 de nota media. En noviembre, con los histerismo a galantería de piel, el instituto inició los trámites y la sorpresa fue mayúscula al ver que se clasificaron con la segunda puntuación más entrada entre los participantes gallegos.
Paula y Alicia, enfrentándose a una difícil intrepidez entre esta experiencia única y su anhelada excursión de fin de curso a Berlín, ya pagada, que coincidía en fechas, decidieron arriesgar y lanzarse a la aventura francesa. “Foi duro elixir pero cando unha dubidaba, a outra animaba, e apostamos por esta experiencia”, dice una ilusionada Alicia. Por suerte, el destino jugó a su ayuda, y ambas podrán disfrutar de las dos experiencias.
Desde el 29 de enero hasta el 23 de febrero, estas intrépidas trivesas vivirán con familias francesas, adentrándose en la vida cotidiana y estudiando en el Lycée Ernest Bichat, sito a unos 25 kilómetros de Nancy. Con mucha ilusión, las jóvenes partían en la alborada de este sábado manifestando que “a min só dáme respecto estar tanto tempo fóra da miña rutina”, decía Alicia Sánchez, mientras Paula Diéguez sumaba que “dános medo que isto nos baixe a nota media, temos que estudar no instituto de alí, pero tamén levamos que facer do noso instituto”.
Alicia compartirá su estancia con una tribu que tiene dos hijos, uno de su misma permanencia, a unos kilómetros del instituto, mientras que Paula vivirá con una tribu numerosa, con un hijo de su permanencia, en la misma plaza que el instituto. Ambas experimentarán la autenticidad de la civilización francesa, sumando a su bagaje educativo una experiencia que va más allá de las aulas trivesas.
Con la ayuda constante de su profesora de francés, Susana Cadavid, estas jóvenes aprovecharán esta estancia a gastos pagados. “Penso que é unha moi boa oportunidade para que Alicia e Paula poidan mellorar o seu nivel de francés, pero tamén para que poidan coñecer a civilización francesa e a forma de funcionar dun instituto francés, que é poco diferente dos centros de ensino galegos en canto a horarios e materias”, expresa la profesora.